Con un lenguaje incisivo, directo, descarnado, sin retóricas ni más adornos innecesarios, nos llega la voz de esta autora argentina. El libro, en realidad, son dos (más algunos poemas inéditos en la parte final) que confluyen en este volumen, bajo un único formato. Así, en La velocidad de una fiesta predominan poemas de estructura larga, de corte prosaico pero sin abandonar la línea de lo poético. En ese terreno Valentina Varas parece moverse con cierta comodidad en una voz que refleja un momento concreto, la actualidad contemporánea del individuo: me gustás así, offline/cuando el wifi nos suelte la mano. En las distancias cortas aflora esa intimidad como una constante cuya cadencia dota de cierto cuerpo a los textos, se convierte en un modo natural de llegar al lector, de activarlo frente a lo que sucede, a lo que está por suceder.

Pero como dice la autora en un verso «lo bueno es solamente una chispa», y puede saltar en cualquier momento. Curiosamente, en los poemas cortos de esta parte -también en algunos largos- se activa con intensidad esa chispa, en la contención se muestra el hallazgo, la sugerencia, la revelación. En Volcán, el segundo libro en cuestión, Varas, asume ese tono suyo tan particular y franco, con un punto más de madurez, manejándose bien en las distancias medias, confirmando esa personalidad femenina cuyo acento es una constante pero sin renunciar al amor y sus ángulos, en ningún momento, y a todo lo que ello conlleva. La inmediatez con que se trata la acción, da una percepción del tiempo y su velocidad desde lo cotidiano, y lleva a reflexionar sobre dicha circunstancia, y sobre todas esas respuestas que no siempre llegan a tiempo pero en las que la voz no deja de indagar.

Los poemas inéditos del tramo final marcan una línea de continuidad de ese tono experiencial intenso, que invita no solo a la cavilación, sino que también pone en tela de juicio comportamientos y hábitos de este tiempo, de este género humano, en la búsqueda permanente de un rayo de ternura que logre salvarnos de la soledad.

Una voz la de Varas que irrumpe para no dejar indiferencia a su paso, mostrando su tarjeta de visita, que propone y dispone con el verso, en ese orden de lo poético en el que la pasión de estar viva y atenta ante la chispa que salta, dota a este universo de sentido.

‘De todas las cosas que nunca entendí siempre va as ser mi favorita’. Autora: Valentina Varas. Editorial: Ediciones Liliputienses.Trujillo, 2018.