En el trágico e inconmensurable escenario de la Primera Guerra Mundial, un joven de 23 años, E.E. Cummings, licenciado en Harvard, llevado por las bondades patrióticas de la guerra, por su espíritu entusiasta y muy probablemente por el anhelo de aventura, se alista como voluntario en el Cuerpo de Ambulancias tan solo un día después de que los EEUU entren en el combate. Es enviado al Frente Occidental cerca de Somme y allí conoce a Willian Statler Brown, estudiante de periodismo de la Escuela de Columbia. Pronto establecen una estrecha amistad que los mantendrá a salvo de los aspectos más tórridos y sombríos de su estancia en el campo de concentración al que serán enviados por desacato a la autoridad.

Edward Estlin Cummings (1894 Massachusetts, 1962 North Conway , Estados Unidos) es un poeta, pintor, ensayista y dramaturgo cuya extensa obra abarca unos 2.900 poemas, dos novelas autobiográficas, varios ensayos y obras dramáticas, además de numerosos dibujos y pinturas. Influenciado por el estilo modernista y posteriormente por el surrealismo francés, su obra se caracteriza por sus tintes vanguardistas así como por la singular idiosincrasia de su sintaxis. De carácter individualista, crítico y anárquico es considerado como uno de los poetas más relevantes del siglo XX.

En La Ferté-Macé, Cummings y su amigo Brown son ubicados en una gran sala con capacidad de hasta setenta camastros donde cada hombre librará su propia batalla personal contra la privación de libertad, la humedad, el frío, las enfermedades, la miseria y los recuerdos. No obstante, este cautiverio los tendrá alejados del escenario aún más dantesco del combate en las trincheras y de las más horribles consecuencias de la Gran Guerra, que marcaron profundamente a escritores como Robert Graves, Siegfried Sasoon o Wilfred Owen, que murió en el frente. La habitación enorme es una novela autobiográfica en la que Cummings describe el lugar y a sus compañeros con una sorprendente habilidad psicológica y agudo sentido del humor en forma de sátira.

El autor va despojando a los reclusos de su traje de «criminales» mientras los muestra en la debilidad de sus ropas desgarbadas e insuficientes, en el desarraigo de sus variadas procedencias, de sus familias y de su cotidianidad para evidenciar de esta forma la futilidad de sus condenas. «Y me maravillaba que Francia pudiera dar algún valor a monsieur Auguste, que había sido detenido (porque era ruso)... y cuya esposa le necesitaba en París porque tenía hambre y porque su hijo empezaba a tener un aspecto pálido y enfermizo. Monsieur Auguste, ese desesperado criminal de metro y medio de altura que, cuando no podía contener las lágrimas… solía gritar cogiendo de un brazo a B y del otro a mí: ...» (págs. 163-164).

Todos ellos, de diferentes nacionalidades, lenguas, clases sociales y oficios, están confinados en el mismo espacio donde el tiempo se ha estancado en un vacío que el autor, como pintor y poeta, llena con pictóricas descripciones y bocetos para quizá así rescatarlos de la ausencia de identidad.

Y aun siendo él mismo partícipe directo de esta reclusión, se sitúa como observador, estableciendo cierta distancia entre su propio yo y lo que acontece ante sus ojos, para describir desde la caricatura y la sátira a aquellos individuos que le resultan antipáticos, como es el caso de los plantons. Mientras, por otra parte, carga de ternura y cierta compasión las descripciones de los que le resultan más humanos y agradables. «... Y el Zulú salió de la comisión con la misma expresión sin expresión con la que había entrado y Dios sabe lo que los Tres Hombres Sabios descubrieron sobre él, pero (fuese lo que fuese) nunca descubrieron y nunca descubrirán ese Algo cuyo descubrimiento fue para mí más valioso que todo el dinero redondo e impotente del mundo: armonía de miembros de hojalata, parpadeo inexpresivo, cuerpo sin prisa y sin hombros, velocidad de saltamontes, alma afincada bajo los sobacos, cayendo misteriosamente sobre la propiedad de dos pies, pez flotante de su esbeltez mitad pájaro…» (págs. 315-316).

La habitación enorme es el testimonio autobiográfico de la realidad que acontece en un campo de concentración en Normandía desde la singular mirada de un poeta peculiar, con una concepción distinta y libre de la sintaxis, la puntuación y la vida misma.

'La habitación enorme'. Autor: Edward Estlin Cummings. Editorial: Nocturna. Madrid. 2019