Hay muchos libros que versan sobre el nazismo pero pocos, como éste, logran desentrañar con rigor y claridad la fundamentación teórica de aquella ideología, su manera de interpretar la historia y el pensamiento, la forma de manipular y tergiversar todo este conocimiento. Los detalles pueden parecer perturbadores, a simple vista, pero son imprescindibles para comprender cómo aquellos hombres pudieron justificar actos tan indignos. El autor argumenta claramente cómo «para desplegar sus potencialidades criminales, el nazismo pretendió ser una revolución cultural» (pág. 13). De ahí el título de este ensayo histórico y filosófico que analiza la ideología nazi desde dentro para cumplir un objetivo esencial: ayudar al lector a entender el desarrollo de aquella barbarie y buscar las claves que eviten su repetición en el futuro.
Suplemento Cuadernos del Sur (pinche aquí)
Johann Chapoutot es un historiador francés experto en la historia y cultura de Alemania. Especialista en el nazismo, ha escrito varios libros sobre fascismo, nazismo y regímenes autoritarios en Europa. Son muy conocidos El nacionalsocialismo y la Antigüedad (2008), El asesinato de Weimar (2010) o Historia de Alemania (2014). Alianza Editorial tiene el acierto de publicar en español su última obra, La revolución cultural nazi (2018), un excelente libro que reúne muchas de las ideas que este autor ha venido tratando en sus obras y artículos anteriores.
Dividido en cuatro partes bien diferenciadas, consigue aportar una visión de conjunto y armar un ensayo certero, claro y riguroso de las bases ideológicas del totalitarismo nazi. Descubre la tergiversación que se hace de la historia, la ciencia y la filosofía con la intención de arrastrar emotivamente a las masas hacia el crimen y el exterminio de una parte de la humanidad.
En las primeras páginas se descubre la manipulación que el nazismo hace del pensamiento aristocrático griego de Platón hasta presentarlo como ideología de raza, una verdadera contradictio in terminis. Así ocurre con los estoicos e incluso el propio derecho romano. Ante el vacío cultural de esa pretendida ideología de raza, el nazismo acude a la antigüedad grecolatina para minar las bases del humanismo, arrasar con el derecho romano en un intento de exaltar un hipotético derecho comunitario germánico y así poder abolir 1789, es decir, toda la base cultural de la revolución francesa, con el objetivo de eliminar el concepto de individuo y libertad. Los grandes pensadores, desde Platón a Kant, debidamente tergiversados, son instrumento de esta «revolución cultural», que pretende rellenar lagunas intelectuales y dotar a esta falsa ideología de un cierto argumento de autoridad. El resultado es un giro etnicista que niega los valores fundamentales de la solidaridad y ética humanas. Las dos últimas partes del libro analizan con detenimiento el contexto histórico e ideológico. Se critica el papel del Tratado de Versalles, «aparecieron por todas partes en Europa numerosas mentes preclaras para deplorar la manera como se había elaborado el tratado, las condiciones en que se firmó y el contenido de sus disposiciones» (págs. 159-160).
Un libro sustancioso y completo que recoge todos los factores que coadyuvaron a la aculturación del pueblo alemán para justificar la barbarie nazi. También el orden sexual, las distintas oleadas ideológicas que pretendían un aumento demográfico y la presión racial, desde la legitimación de los hijos tenidos fuera del matrimonio, hasta el divorcio e incluso la poligamia. «Tener hijos, sea como sea, es el deber de toda mujer» (pág. 204), pregonaban los jerarcas nazis. Se dieron incluso casos de algunas esposas que sufrían las infidelidades de sus maridos mientras otras animaban fervientemente a sus esposos a «procrear fuera del marco conyugal» (pág. 214).
Asistimos también a un interesante estudio del caso Eichmann y las opiniones de Hannah Arendt, que permiten entender la importancia del pensamiento, la ética y la humanidad en la educación. ¡Y como previsión para el futuro! Es muy elocuente la imagen de ese Eichmann que manda a millones de seres humanos a la muerte sin pestañear, sin sentir el más mínimo cargo de conciencia, escudándose en la obediencia debida, como una máquina que ejecuta un simple cálculo matemático. Pero ese Eichmann que pretende evadir responsabilidades ante los jueces es muy diferente de aquel otro que en Argentina suscribía y adoptaba como propios los crímenes nazis.
‘La revolución cultural nazi’. Autor: Johann Chapoutot. Edita: Alianza Editorial. Madrid, 2018.
