Este libro representa otra perspectiva (lejos de modelos televisivos) sobre las gentes del oeste americano. Estos cinco relatos de Bret Harte nos introducen en variopintos paisajes y acciones, pero que casi siempre mantienen un hilo común: el del narrador que imprime un ritmo un tanto especial a la trama y a la respiración de los personajes dentro de la misma.

La conducción y manejo por estas piezas resulta fácil, atrayente, pero lo destacable es ese equilibrio que se guarda entre la acción propia de un salvaje oeste y esas estampas narrativas descriptivas que tienden a suavizar la escena, a darle otro fondo. No es casualidad que Charles Dickens (o el mismo Borges) reparase y pusiese énfasis en el estilo de este escritor, que lo halagase, porque había algunos puntos de contacto, cambiando de escenario y gentes.

Se retratan tahúres, viajantes, huérfanas, perros sin dueño, indios, etcétera, digamos esos sujetos cuya marginalidad ya les proporciona un plus de autenticidad desde el punto de partida y ante los que el autor muestra su simpatía. En personajes que nadie suele reparar, Harte centra sus historias en las que brilla siempre una cierta ternura, un hueco para la humanidad, sin perder cierto tinte irónico ni un sentido del humor que mantiene las piezas con una calidez visible. Bret Harte sabe jugar sus cartas y plantearnos una normalidad que respira extrañeza, como una vieja nostalgia que el paisaje parece encender en cualquier instante.

‘El lejano oeste’. Autor: Bret Harte. Editorial: Ediciones Traspiés. Granada, 2017.