Vecinos de distintas localidades han tomado la iniciativa de realizar mascarillas ante la escasez de este material de protección tan importante en esta crisis del coronavirus. coronavirusEste es el caso de Villanueva de Córdoba, donde la familia Molinero Vigara tomó la iniciativa de cortar telas para hacer mascarillas y se han sumado muchas otras, hasta el punto de que hay más de 30 mujeres en la localidad fabricándolas con tela y otras, junto a establecimientos locales, que aportan las gomas y más tela. La alcaldesa, Dolores Sánchez, ha agradecido el gesto de sus vecinos y ha señalado que esas mascarillas se han ido entregando en las residencias. La alcaldesa también explicó que un trabajador del Ayuntamiento ha ido repartiendo las medidas de protección en los comercios de alimentación y en el mercado municipal.

En Villanueva del Duque y en Pozoblanco ha habido también iniciativas parecidas. Laly explicaba que habían enviado una prueba a enfermeras del hospital Valle de los Pedroches «y estas se emocionaron por el gesto».

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En la provincia de Córdoba está habiendo otros movimientos también para fabricar viseras de protección para el personal sanitario mediante impresoras 3D. En Doña Mencía, la iniciativa de participación ciudadana, y canalizada por el Ayuntamiento, está siendo un rotundo éxito pues se elaboran mascarillas artesanales, se desinfectan las calles y se ayuda a las personas mayores que no pueden salir a la calle a realizar las compras.

Más de 1.200 mascarillas estarán en breve disponibles para los vecinos de Doña Mencía, que el Ayuntamiento va a comenzar a repartir entre la población, atendiendo a criterios de mayor vulnerabilidad.

Más de 80 mujeres voluntarias están en estos momentos poniendo todo su empeño para elaborar quince mascarillas cada una para que estén en perfecto estado y se puedan usar. El Ayuntamiento ha sufragado los gastos. No son las mascarillas F2, pero se pueden lavar y esterilizar y, sobre todo, son una muestra solidaria de los vecinos. Por otro lado, más de quince agricultores han ofrecido al Ayuntamiento sus tractores para colaborar con las labores de desinfección de las calles.

Por su parte, el Ayuntamiento de Bujalance ha pedido a costureros y costureras que tengan máquinas de coser para que colaboren haciendo mascarillas. La respuesta ha sido inmediata y satisfactoria. Un llamamiento similar se hizo desde el Consistorio de Posadas, que también recibió una respuesta más que satisfactoria de los vecinos.