El 12 de diciembre pasado, cuando el Papa inició su cuenta en Twitter, José María Mayoral, en la red social @josemarimayoral, preguntó en un tuit: ¿Cómo podemos ofrecer la fe en nuestro tiempo?, a lo que @pontifex contestó: "Dialoga con Jesús en la oración, escuchas a Jesús que te habla en el Evangelio, encuentra a Jesús presente en el necesitado". Fue la primera vez que el Papa, o su perfil en Twitter, contestaba a un tuit y en algunos noticiarios se hicieron eco de que contestó a un español. Un cordobés, por más señas.

Pero el día que este cordobés no olvidará es el lunes 11 de febrero del 2013. "Tras planificar el trabajo de lo que prometía ser una tranquila semana, a mediodía saltó la noticia --recuerda--. En los primeros instantes no nos lo creíamos. Pero a los cinco minutos nuestro director nos lo confirmó. Dejamos todo y nos pusimos manos a la obra. Tras unas horas de infarto, volví a mi actividad principal en la agencia. Me pasé 'dando caña' con el tema en las redes sociales, desde las cuatro de la tarde hasta las dos de la madrugada. Intercalaba mi actividad ante el ordenador con algún ‡'salto' al Vaticano a por cintas de ruedas de prensa o para ayudar a los técnicos. Estos días todos estamos para todo, y es increíble cómo funciona el engranaje de Rome Reports".

Tras la renuncia de Benedicto XVI, José María Mayoral ha tenido el "gran privilegio" de asistir en el Vaticano a la última audiencia general del actual Papa en el Aula Pablo VI, así como a la última misa pública del Pontífice en el interior de San Pedro. "Estuve tuiteando ambas en directo para la agencia". Por eso, "estar en Roma en estas fechas es para mí es algo muy grande".

Cada mañana, cuando este cordobés se dirije en tren a su trabajo, entre la Estación de Tren Roma-San Pietro y la Basílica de San Pedro hay un momento en el que se ven las ventanas de los apartamentos pontificios. "Cuando paso por allí cada mañana, en mi interior digo: 'Buenos días Santo Padre', y es algo que me ayuda a afrontar la jornada y a estar en comunión con la cabeza de la Iglesia, el sucesor de Pedro".

En las fotos, de izquierda a derecha y de arriba abajo: José María, con la cúpula de San Pedro al fondo; con un amigo ante el Coliseo; en la plaza de España, esperando una intervención del Papa en la plaza de San Pedro, con la plaza del Popolo al fondo, compartiendo mesa y mantel con unos amigos y compañeros, en su mesa de trabajo y dispuesto a un almuerzo rápido para seguir con la tarea en la ciudad de la que está enamorado.