Este sábado del mayo aracelitano ha despertado con una gran sorpresa para todos los lucentinos y devotos a la Virgen de Araceli, su imagen ha bajado desde su Real Santuario de Aras hasta la iglesia mayor de San Mateo en la madrugada , en silencio y recogimiento para cumplir estrictamente las medidas de seguridad de esta pandemia . La Virgen de Araceli preside ya el retablo mayor de la parroquia de San Mateo para recibir a sus hijos después del confinamiento del estado de alarma que ha impedido que pueda estar en su ciudad para celebrar sus Fiestas junto a su pueblo.

Cuando daban las tres de la madrugada, y tras realizar una meditación ante la Virgen, los miembros de la Junta de Gobierno de la Real Archicofradía de Araceli y su Vocalía de Juventud, siguiendo estrictamente las recomendaciones de las autoridades sanitarias, han guiado los pasos de María Santísima de Araceli en su camino a Lucena sobre una plataforma móvil.

El traslado ha estado presidido por el vicario episcopal de la Campiña, David Aguilera Malagón, y se ha desarrollado bajo el recogimiento de las velas y el leve murmullo de los rezos a María Santísima de Araceli que llegaba a la Puerta de la Mina minutos antes de las cinco. El recorrido continuaba por la calle Maquedano, la plaza del Coso y calle Barahona de Soto y cuando el reloj marcaba las cinco y diez de la madrugada, la Patrona de los lucentinos entraba en su parroquia donde permanecerá por un tiempo aún indeterminado. En la primera misa ofrecida en San Mateo los fieles han mostrado su responsabilidad ante la Virgen de Araceli , guardando las distancias , pues nunca debe de superar el cincuenta por ciento de su aforo . El párroco David Aguilera ha hecho un llamamiento para que esta sea la tónica d elos fieles para visitar a la Virgen y mantener la seguridad entre los devotos .

La parroquia de San Mateo estará abierta de lunes a viernes de 7,30 a 13,30 horas y de 19 a 21 horas y los sábados y domingos de 8,30 a 13,30 y de 19,00 a 21,00 horas.

Misa en San Mateo. Foto: J.A.F.