La campaña de recogida de alimentos no perecederos para la Caravana Andaluza por la Paz de ayuda a los campamentos de refugiados del pueblo saharaui ha logrado recoger en Pozoblanco un total de 1.047 kilos de legumbres, pasta, arroz, aceite, azúcar y otros alimentos que ya han iniciado su camino para acabar siendo repartidos por la Media Luna Roja y alimentando la esperanza del pueblo saharaui en los campos de refugiados de Tinduf, en Argelia.

Juan Luis Ortiz, de la Asociación Cordobesa de Amistad con los Niños y Niñas Saharauis, ha destacado la colaboración de los colegios Virgen de Luna, Manuel Cano, Ginés de Sepúlveda, La Inmaculada, las escuelas infantiles de La Luna, Garabatos, Monigotes y Pasitos y los institutos Antonio María Calero y Ricardo Delgado Vizcaíno. También ha agradecido la implicación de los supermercados Siete Villas y Más y Más, así como la de sus trabajadores.

Juan Luis Ortiz ha puesto de relieve la colaboración prestada por la Cofradía del Silencio al ceder su casa de hermandad para empaquetar los alimentos y porque «sus hermanos se involucraron en la campaña y la han hecho suya hasta el final, acabando mezclándose con los jóvenes que venían a ayudar desde la parroquia de Santa Catalina o el colegio de Las Concepcionistas».

Lo que ha salido desde Pozoblanco como resultado de estos días de trabajo «son mucho más que alimentos, ya que representa la ilusión de trabajar por los más necesitados y es esperanza para un pueblo que la necesita más que ningún otro», según ha destacado Ortiz, que ha añadido que «cuando todos se hacen uno para un fin común, todo es mucho más fácil».

Estos alimentos se unirán a los que se recauden en el resto de Andalucía y partirán hacia los campamentos de refugiados saharauis, si bien desde la Asociación Cordobesa de Amistad con los Niños y Niñas Saharahuis, que acogen cada verano, «lo que este pueblo necesita es que, después de más de 40 años de tener invadida ilegalmente su tierra, se la devuelvan y los dejen vivir de una vez en paz».