La última campaña de excavaciones en Torreparedones ha finalizado tras dos intensos años de trabajo. Los resultados obtenidos han sido muy importantes y suponen un avance cualitativo y cuantitativo para el parque arqueológico, «en especial para el conocimiento de la fase de ocupación romana que se está revelando como la más potente», señala el arqueólogo municipal, José Antonio Morena.

Los primeros trabajos se centraron en la parte más meridional del yacimiento y pusieron al descubierto una casa romana, así como dos tramos de sendas calles pavimentadas. La casa tiene una superficie de unos 700 metros cuadrados y consta de una serie de estancias distribuidas en torno a un patio porticado. El elemento más significativo es la presencia de un gran horno para la fabricación de pan y ya se la conozca como la Casa del Panadero.

Tras la localización del anfiteatro romano por el profesor Antonio Monterroso, en base al estudio de fotografías aéreas, se consideró oportuno hacer una prospección geofísica en los terrenos. Obtenida la autorización del propietario de los terrenos, la Junta de Andalucía autorizó al Ayuntamiento de Baena para realizar dicho trabajo que fue financiado por el Ayuntamiento de Castro del Río. El mapa de anomalías magnéticas ratificó la existencia del edificio y la continuación de la calzada romana desde la puerta occidental de la ciudad.

La última actuación ha consistido en la apertura de dos sondeos en la manzana situada al oeste del foro con el objeto de comprobar la posible existencia del teatro, pero los resultados provisionales lo han descartado. Sí se han documentado restos de una estancia con paredes decoradas con pinturas de colores.