La Guardia Civil investiga el robo de alrededor de 6.000 kilogramos de aceituna en una finca ubicada en el pago de Noné junto a la carretera de Las Navas del Selpillar, a unos 5 kilómetros del casco urbano de Lucena. Los ladrones fueron sorprendidos hacia las 3 de la madrugada del domingo, cuando habían recogido buena parte del fruto robado en sacos y rápidamente emprendieron la huida. Los guardas pudieron comprobar que el grupo había destrozado a palos gran número de olivos, por los que los daños son cuantiosos.

Este es el primer robo importante del que se tiene constancia en Lucena en esta campaña, que se está retrasando de forma importante debido a la falta de lluvias . Ello hace que la aceituna no haya madurado todavía y que se esté arrugando debido a las bajas temperaturas, por los que algunos olivareros no han iniciando aún la recolección.

Los robos vuelven a desatar la incertidumbre entre los olivareros, si bien es verdad que en los últimos años ha aumentado la seguridad, gracias a la implantación de un servicio de guardería privada, que financian tanto las dos cooperativas, Olivarera de Lucena y Nuestra Señora de Araceli, como el Ayuntamiento, que se suma a la labor de los equipos Roca de la Guardia Civil.