El Centro de Servicios Sociales de Puente Genil atendió a más de 7.000 personas el año pasado para recibir asesoramiento en materia de dependencia, programa de ayuda a las familias, o menores. Una cifra que, según la responsable de esta área en el Ayuntamiento, Pepa Ramos, llama la atención por la tendencia a la baja registrada en el PAF (unas 230 familias) y en las ayudas sociales con respecto al 2016. Sin embargo, puso de relieve la atención que reciben unos cincuenta menores víctimas de maltrato y trata de personas tutelados por el centro. Por otra parte, los expedientes abiertos y el trabajo directo con la familia están en torno a los 5.000.

La Delegación de Servicios Sociales en el municipio contará en el presente año con un presupuesto de cuatro millones de euros, cantidad de la que se reservará un porcentaje para el Programa de Ayuda a las Familias, que tendrá como novedad la apertura de bolsas específicas dirigidas a mayores de 50 años, jóvenes o personas con discapacidad. Aunque una de las novedades en esta materia es el abono de la renta mínima de inserción por parte de la Junta de Andalucía a aquellas familias que cumplan el perfil y los requisitos previamente establecidos. En este sentido, Ramos asegura que unas 4.000 personas podrían ingresar hasta 700 euros al mes en la localidad, siendo los vecinos de las barriadas de Bailén, Francisco de Quevedo o Juan Rejano, así como otros usuarios de la Delegación los candidatos a los que irían destinadas estas ayudas.

La edil de Servicios Sociales también hizo referencia al borrador de intervención en zonas de transformación social, que en estos momentos se encuentra en fase de alegaciones y del que el Ayuntamiento pontano espera recibir una cantidad de dinero importante como para abordar un plan para la rehabilitación de viviendas.