El Seprona de la Comandancia de la Guardia Civil Córdoba ha llevado a cabo un total de 3.426 actuaciones proactivas en defensa de la naturaleza, la ordenación del territorio y el patrimonio histórico durante 2016. Según informa el Instituto Armado, 1.161 de estas actuaciones fueron denuncias por infracciones administrativas, 1.405 correspondieron a inspecciones administrativas de actividades industriales, deportivas, económicas, comerciales y lúdicas, 358 a controles y verificaciones de actividades distintas de las anteriores, 434 identificaciones de personas y vehículos, 26 delitos medioambientales y 42 personas detenidas o investigadas por tales hechos.

En concreto, la labor del Seprona se identifica en un porcentaje muy alto con la faceta de policía administrativa, esto es, verificar y hacer cumplir la normativa que regula las actividades potencialmente perturbadoras del medio ambiente y la naturaleza y dichos cometidos se desarrollan a través de inspecciones administrativas efectuadas sobre las más diversas actividades. En consecuencia, del total de inspecciones administrativas, 266 fueron a explotaciones agropecuarias con la finalidad de comprobar los registros ganaderos, la correcta gestión de desechos, el uso de productos fitosanitarios o el transporte de animales vivos.

Además se inpeccionaron 214 talleres dedicados a la reparación de automóviles que operan al margen de las autorizaciones necesarias para tal actividad.

Finalmente y atendiendo a la importante actividad cinegética que se desarrolla en la provincia, el esfuerzo de las patrullas del Seprona se ha dirigido a verificar que las distintas cacerías se celebrasen con observancia de las medidas de seguridad y a evitar los episodios de furtivismo.

Como consecuencia de la labor inspectora se detectaron 1.161 infracciones administrativas. De su conjunto cabe citar que 151 lo fueron por vulnerar la normativa en materia de residuos. En segundo lugar, con 142 denuncias, se situaron las infracciones en materia de caza. Le siguen las 127 denuncias por vulnerar normativa de sanidad animal, seguida de las 128 infracciones en materia de animales de compañía.

El Seprona investigó además 26 delitos, entre los que primaron los relativos a la fauna, los animales domésticos, el urbanismo, los incendios forestales o el patrimonio histórico. Como responsable de los mismos se pusieron a disposición de las autoridades judiciales a 42 personas como detenidas o investigadas. Entre las operaciones más destacadas estuvieron operación Cervus, que se investigó la muerte por apuñalamiento de especies de caza mayor con difusión en redes sociales; la operación Secunda, sobre daños en yacimiento arqueológico, y la operación Almaja, sobre construcciones agropecuarias realizadas sin licencia urbanística.