El cultivo del ajo no es en absoluto ajeno a los estragos que está provocando en la agricultura la escasez de lluvia. Así lo constataron ayer los principales productores de la provincia, durante el encuentro que mantuvieron en la sede de Asaja-Córdoba con el objetivo de analizar la situación del sector, así como las previsiones de siembra de la actual campaña, en la que se prevé una reducción de la superficie a causa las adversas condiciones climatológicas.

El presidente de la Sectorial Nacional del Ajo, el montalbeño Miguel del Pino, analizó junto a los principales ajeros de la provincia la evolución de la comercialización de los ajos de la última campaña, así como las perspectivas para la próxima. Y aunque Miguel del Pino reconoció que «aún es pronto para realizar una estimación concreta de la superficie sembrada de ajos en la provincia», la Sectorial del Ajo aventuró que se avecina una campaña «similar o algo inferior a la anterior», cuando se llegaron a cultivar unas 2.400 hectáreas.

«Parece que va a disminuir ligeramente la siembra del ajo morado debido a la escasez de agua y, además, se ha registrado una siembra algo menor de la variedad spring», reconoció el presidente de la sectorial quien, no obstante, destacó la estabilidad en la que se encuentran los mercados, con una salida de producto desde los almacenes «a un ritmo normal» y con un mantenimiento general de los precios.

La reunión celebrada ayer en Córdoba contó con la presencia del gerente de la Comunidad de Regantes del Genil-Cabra, José Berlanga, que informó sobre el estado actual de los riegos, debido a la «gran preocupación que existe por la falta de lluvias».