El impedimento de que una adolescente de Rute sea dama de las próximas fiestas de la Virgen de la Cabeza por haber abortado el año pasado ha llegado al ámbito público cuando la madre, Isabel G., ha acudido a los medios de comunicación para denunciarlo. La madre considera "una discriminación y una humillación" el tratamiento que ha recibido su hija por parte de miembros de la cofradía y del consiliario de esta, el sacerdote Francisco Aurioles, con el que mantuvo una reunión. La madre piensa que tenía que haber sido el sacerdote quien debería haberle comunicado este impedimento y haberle ofrecido la posibilidad del perdón y la confesión.

Fue la cofradía quien le propuso a su hija ser dama de las fiestas, título que aceptó al ser devota de la Morenita. Tras el acto público de imposición de medallas a la reina y damas de estas fiestas, el pasado 25 de enero, el sacerdote conoció que la joven había abortado el año pasado, situación incompatible con el nombramiento de dama, por lo que pasados unos días se reunió con los miembros de la cofradía. Isabel G. critica la forma en que se le comunicó la decisión, una llamada telefónica de la cofradía, y la sorpresa que le produjo comprobar que "al salir a la calle, medio pueblo ya sabía la noticia". Así, que el aborto de su hija haya llegado a todas partes le ha causado "un daño moral y psicológico", afirma.

PROCESO LEGAL La madre lamenta que "pasado este tiempo, y viendo como está la situación, no he recibido ni una llamada de la cofradía" para saber el estado de su hija. Defiende que la interrupción del embarazo ha sido un procedimiento legal y asegura que no conocía que esta circunstancia le impidiera a su hija ser dama de las fiestas. Confiesa que agradecería unas disculpas por "el daño que se le ha hecho".

Por su parte, el párroco y consiliario de la cofradía de la Virgen de la Cabeza, Francisco Aurioles, ha accedido a dar el punto de vista "de la Iglesia Católica, expresado con claridad meridiana en el catecismo", en el que se dice que "la vida humana debe ser respetada y protegida de manera absoluta desde el momento de la concepción" y habla de "la maldad moral de todo aborto provocado", que es motivo de excomunión por falta grave. Por este motivo la joven, que ahora tiene 15 años, ha quedado "fuera de la comunión de la Iglesia", afirma el sacerdote.

ENCUENTRO CON LA MADRE En la reunión con la madre y la chica, según Aurioles, les comentó que, "partiendo de esta desgracia", el siguiente paso es solucionar el problema "y la Iglesia, como buena madre, tiende su mano, y si hay arrepentimiento y reconozco este pecado pidiendo perdón a Jesucristo, por medio del sacramento de la confesión y de la eucaristía se puede incorporar de nuevo a la Iglesia". Aurioles asegura que "indudablemente, si hay arrepentimiento", esta joven podrá ser dama de las fiestas de la Morenita, porque "las puertas de la parroquia están abiertas".

El sacerdote también ha defendido el procedimiento llevado a cabo. "Como consiliario tengo la obligación de dirigirme a la autoridad máxima, que es el presidente de la cofradía", para comunicar lo que sucede. Aurioles considera que "para que no ocurran estos casos, que sangran la vida de una parroquia, cofradía o una familia", deben encauzarse a través de una agrupación de cofradías, que en la actualidad no existe en Rute. Este órgano es el que "de forma regulada, según la doctrina de la Iglesia, debe decidir quién puede acceder a los diferentes cargos", como presidentes, miembros de cofradías, damas y reinas, pregoneros y hermanos mayores, ha explicado el sacerdote Francisco Aurioles.