La Guardia Civil auxilió el pasado sábado a 61 personas de una embarcación turística que se averió y quedó a la deriva en el embalse del Bembézar. Varias patrullas se trasladaron hasta el lugar tras recibir el aviso del centro de coordinación de emergencias 112, para lo que se estableció un dispositivo de servicio encaminado a su localización, ya que en el aviso al 112 no se precisaba.

Según ha informado el instituto armado, a primeras horas de la noche, uno de los guardias civiles integrantes del dispositivo consiguió contactar a través de teléfono móvil con el propietario y patrón de la embarcación, quien comunicó que había conseguido desembarcar a todo el personal del barco en una zona conocida como Sendero de los Ángeles, del término municipal de Hornachuelos. Los guardias civiles que integraban el dispositivo se desplazaron por el citado camino, llevando consigo linternas, así como prendas de abrigo y agua.

Pasada una hora y siguiendo el sendero, consiguieron localizar la expedición, compuesta por un total 61 personas, (59 turistas, 1 guía turístico y el patrón de la embarcación), comprobando que muchas de estas personas eran de avanzada edad, ofreciéndoles agua y la ropa de abrigo de la propia uniformidad de los guardias civiles.

Cuando faltaban unos dos kilómetros aproximadamente para llegar al punto donde se encontraban los vehículos oficiales, se unieron tres bomberos del parque de Palma del Río, dotados también con iluminación, quedando así completamente iluminado el resto del camino.

Los turistas estaban alojados en Hornachuelos, siendo trasladados con prioridad las personas de mayor edad y personas con algún tipo de enfermedad que habían tenido más dificultad para realizar el camino a pie, si bien todas se encontraban en perfectas condiciones sin necesidad de recibir asistencia sanitaria.