El subdelegado del Gobierno en Córdoba, Juan José Primo Jurado; el comandante jefe de operaciones de la Guardia Civil en la provincia, Fernando López-Rey; y representantes de Asaja, UPA, Faeca, UGT, CCOO, Almazaras Industriales y UAGA-COAG se reunieron ayer y acordaron no autorizar de forma oficial la rebusca de aceituna en el campo cordobés. No obstante, se dejó abierta la posibilidad a que cada propietario pueda llevarla a cabo ciñéndose a la legalidad vigente.

Esta reunión fue duramente contestada por CCOO, cuyo secretario general del sindicato provincial Agroalimentario, Rafael Estévez, afirmó que "es una tomadura de pelo que a estas alturas, cuando ya no hay aceituna y la práctica totalidad de las almazaras ya han cerrado, se plantee una reunión para discutir un tema que el sindicato ya había puesto sobre la mesa en el mes de diciembre para que pudiera llevarse a cabo en cuanto acabase la recogida".

En la reunión, según explicó el sindicato, se planteó que la rebusca propicia la aparición de "delincuentes" y la comisión de robos y destrozos en las fincas, por lo que las organizaciones agrarias no van a recomendar la autorización de esta práctica habitual tras la cosecha.

En este sentido, Estévez criticó "la poca sensibilidad de la Administración y el empresariado con las miles de familias que pasan necesidad en la provincia". Así, recuerda que son la Subdelegación del Gobierno y la Guardia Civil "los que tienen que velar por la seguridad en el campo y evitar robos o daños y no suponer que cualquiera que trabaje en el campo es un delincuente por verse forzado a rebuscar para poder alimentar a su familia".