Las oficinas de la Asociación de Fabricantes del Frío están localizadas en la sede del antiguo Centro Tecnológico de la Madera, que posteriormente fue sede del Instituto Andaluz de Nuevas Tecnologías (IAT). En este sentido, Servián considera que «debe ser el Ayuntamiento de Lucena el que lidere y gestione el centro, porque sus intereses serán los intereses de la ciudad y no los de un sector determinado, y en él vuelvan a integrarse sectores como la madera, que tiene mucho que decir a pesar de haber pasado un momento muy difícil por la crisis, y otros sectores que pueden encontrarse unas instalaciones de primera línea, como un coworking, que necesita de una oficina, un despacho, que les mantenga en contacto con fabricantes y celebrar sus reuniones, para lo que un centro tecnológico es el sitio ideal». Una de las ideas, apunta Servián, «es que en el centro converjan Andaltec, Centro Tecnológico del Plástico, Cetemet, Centro Tecnológico del Metal, y el del sector aeronáutico, todos ellos interesados en poder ofrecer cursos de manera constante para avanzar tecnológicamente».