La concejalía de Obras y Servicios del Ayuntamiento de Aguilar ha finalizado la instalación del monumento al sol que se ha levantado en la esquina que une las calles Belén y Camino Ancho. Consiste en un basamento de piedra y mármol semicircular sobre el que se sitúa una gran columna de mármol rojo de Cabra, con pedestal y capitel. Sobre este último, se sitúa una escultura dedicada al sol, realizada en piedra caliza -los rayos- y en mármol rojo -el centro donde se ha idealizado el rostro del astro rey-.

El monumento es otro de los proyectos incluidos en el programa de embellecimiento y ornamentación del casco urbano, situado en el Barrio Bajo de Aguilar. En este caso, perpetúa la nomenclatura popular que se ha mantenido hasta nuestros días conocida como la “Puerta del Sol".

El concejal de Obras, Antonio Maestre, informó de que el propósito del monolito ha sido diseñado por Ricardo Llamas y que ha sido llevado a cabo por el marmolista y artesano local Manuel Morillo Cruz, quien también estuvo durante su presentación, junto a la alcaldesa de Aguilar, Carmen Flores.

Maestre hizo referencia a la saga de marmolistas familiar, conocidos como “El Picas”. Aunque originales de Lucena como picapedreros, se afincaron en Aguilar para especializarse en la artesanía del mármol y la piedra hasta la actualidad. El concejal aseguró que se mantenía así otro de los objetivos de este programa que «los artistas y artesanos locales dejen testimonio de su arte en el callejero del pueblo».

Importancia histórica

La "Puerta del Sol” era "uno de los accesos al callejero antiguo de la población, que servía para controlar la salida o entrada al mismo cuando se producía alguna calamidad, como eran las pestilencias o pandemias", según explicó Antonio Maestre mediante nota de prensa.

Paco Cabezas, técnico de Cultura, contó a este periódico cómo durante siglos existían distintas puertas por las que se "administraba el control de acceso y salida al casco histórico del pueblo» y donde "se incluían uno o dos porteros". Cabezas habla de la "importancia de esta Puerta del Sol" por la cercanía a la fuente de Las Piedras y por tener un mayor tránsito debido a su cercanía con Montilla.

Antonio Maestre explicó que era un cruce de caminos a estas comunicaciones entre Montilla, Córdoba y Málaga, clave en el callejero de los siglos XVI y XVII de Aguilar. Además, la fuente de Las Piedras era, en ese momento, la principal fuente que suministraba de agua a la población. Asimismo, su orientación, hacía posible que ese punto fuese iluminado "por los primeros rayos del sol nada más elevarse este sobre el horizonte de la sierra egabrense".