La campaña citrícola se encuentra en torno a un 60% y los precios siguen sin remontar. El presidente de la asociación profesional citrícola Palmanaranja, Antonio Carmona, reconoce que se esperaba un repunte con la variedad salustiana tras la Navidad y lamenta que «nos hemos encontrado con Marruecos y Egipto, un país este último al que hay que darle mucha importancia, estar pendiente de la evolución de su producción», ya que «por primera vez en la historia aparece como país número uno exportador a nivel mundial». Carmona explica que con los precios de la naranja de Egipto «tendríamos que pedirle a cada agricultor 6 céntimos por kilo». El presidente de la interprofesional afirma que «hemos desaparecido de los mercados europeos», y añade que «nos estamos defendiendo en comercios lejanos, gracias a prospecciones de mercado en Canadá, China y Corea del Sur».

Carmona señala que la campaña va más lenta cuando ya se trabaja con variedades tardías y muestra confianza en su finalización diciendo que «tendrá que ser algo más larga, nos facilitaría no presionar la venta y defender los precios».

Entre otros vectores que pone sobre la mesa Palmanaranja en la crisis de precios, con incidencia directa en la rentabilidad de los productores, aparece la sobreoferta por aumento de la producción nacional, es decir, hay «más fruta para vender en menos tiempo, y la demanda no ha podido absorber el volumen». Córdoba se ha situado en la actual campaña como la segunda productora de naranja dulce con 309.595 toneladas, un 16,4% más que la anterior, con la superficie citrícola concentrada en La Vega.

Ante esta realidad, plantea que el sector necesita un buen análisis porque no hay respuesta para la pregunta del productor de qué variedad siembra. En este estudio, apunta que hay que conocer el número de hectáreas a nivel nacional, edades, curva de producción y una comparativa con la curva de la demanda a nivel nacional e internacional, proyectos de I+D con algunas variedades, la organización del sector, poner en marcha la interprofesional a nivel nacional y, sentencia, «especializarnos mucho con variedades de mucha calidad, como punta de lanza, y el cultivo ecológico». También resalta la necesidad de hacer campañas de promoción.

La consejera de Agricultura, Carmen Crespo, que ayer se reunió en Sunarán con Palmanaranja, informó de que va a trasladar a la Mesa Nacional de Cítricos la necesidad de controlar los contingentes productivos. «Intentamos plantear al Gobierno central y a Bruselas que en esos terceros países hay que cumplir con los contingentes, al igual que con la inspección», dijo, y que «se controlen los contingentes en los puntos de inspección fronteriza», como Gibraltar. Crespo anunció una campaña de promoción conjunta con el sector para incrementar el consumo de cítricos. La consejera destacó la concesión de 17 ayudas a la agroindustria cordobesa (algo más de 6,4 millones de euros para olivar, cítricos y frutos secos).