El concejal del Partido Popular (PP) en el Ayuntamiento de Lucena, Ángel Novillo, acompañado de su portavoz municipal, Francisco Aguilar, ha denunciado este lunes "el estado de ruina en el que se encuentra el edificio de las antiguas Bodegas Víbora".

Como recordó Novillo, este inmueble fue adquirido por el Ayuntamiento lucentino en el año 2007 con una inversión de 1.551.316 euros, cantidad a la que hay que sumar el importe de la intervención llevada a cabo por la escuela taller, "lo que ha supuesto un desembolso global para las arcas municipales de más de dos millones y medio de euros".

Novillo ha hecho memoria de los usos previstos para este inmueble, señalando que "uno de los usos era municipal y otro de ámbito privado mediante cesión para futuro centro turístico o de restauración, iniciativas que quedaron en el olvido". El concejal popular apuntó que, en 2013, "José Cantizani, por entonces concejal delegado de Obras, apuntó la posibilidad de destinar este inmueble a dependencias municipales y sede de la Policía Local, proyectos que tampoco han fructificado".

Para el concejal del Partido Popular, "el nulo éxito de todas estas iniciativas se debe, 13 años después, a la ineficaz gestión del equipo de gobierno, que continúa sin tener un proyecto o iniciativa de presente y futuro para este edificio".

Además, Ángel Novillo manifestó que "los vecinos de la zona se han quejado de malos olores, la presencia de animales y de la suciedad que se acumula en estas antiguas bodegas, sin olvidar el riesgo de derrumbe que podría ocasionar graves daños a los edificios colindantes".

El representante del PP ha insistido en que "el Consistorio no es ejemplo a la hora de adecentar las parcelas de titularidad municipal, mientras sí lo exige a los particulares", y demandó al alcalde una "urgente limpieza integral del solar y la puesta en marcha de los trabajos necesarios para asegurar los muros perimetrales".

Por último, solicitó al alcalde que "convoque una reunión con el conjunto de portavoces municipales para estudiar un posible uso y una línea de financiación pública o privada que garantice la recuperación de este edificio, tal vez, como defienden los populares, como centro de día de mayores".

Las instalaciones de Bodegas Víbora se remontan al siglo XIX, siendo un edificio de valor histórico, motivo por el que fueron adquiridas por el Consistorio lucentino.