La obras de calle Real de Villanueva de Córdoba, que garantizarán la accesibilidad y la reforma integral de una de las principales arterias del centro del municipio, tendrán un coste de más de 162.000 euros y darán empleo a 60 personas, según explicó ayer la concejala de Urbanismo, Mercedes Pedraza.
De los contratos previstos, el 80 por ciento serán para peones y el 20 por ciento para oficiales.
La concejala recordó que «es una demanda de los vecinos desde hace unos años, debido al mal estado del pavimento adoquinado, que data de los años 30, y por la estrechez de las aceras».
Mercedes Pedraza ha señalado que la ejecución de los trabajos obligará a cambiar la carrera oficial de la Semana Santa y explicó que ha mantenido un encuentro con la Cofradía General de Semana Santa y con las distintas hermandades y se ha acordado un recorrido alternativo, «que está pendiente de definir».
Además, según ha precisado la concejala, se han desarrollado reuniones con los vecinos para que expongan sus dudas y problemas y se han detallado los cambios de tráfico como el cambio de sentido en la calle Ramón y Cajal y en la calle Atahona.
La concejala de Urbanismo ha descrito que la reforma se centrará en la ejecución de una plataforma única en la que peatones y vehículos transitarán al mismo nivel con una separación de bolardos y jardineras, que delimitarán los espacios y embellecerán el entorno.
Aprovechando la intervención, se sustituirán las infraestructuras de suministro de aguas y saneamiento.
La obra está prevista en dos fases, ya que la primera comprende el tramo situado entre la calle Todos los Mártires y Atahona, mientras que la segunda va desde Atahona hasta la calle San Sebastián.
Las obras de la primera fase han comenzado esta misma semana y se prevé que finalicen a finales de junio.
La calle Real es una zona muy transitada, por la que se accede a la zona comercial y a través de la cual se llega a distintos edificios públicos como el Ayuntamiento o la parroquia de San Miguel por su proximidad con la Plaza de España. La edil de Urbanismo, Mercedes Pedraza, ha insistido en que «somos conscientes de las molestias, pero serán temporales y el resultado final valdrá la pena».
