La ermita de la Antigua, donde se venera la imagen de la Virgen de la Piedad, patrona de Iznájar, ha sido declarada santuario este pasado sábado, en una celebración eucarística oficiada por el obispo, Demetrio Fernández, y por el párroco de Iznájar, José Bernardo Juan Luque, que desde ahora será rector del santuario.

Durante este acto se dio lectura al decreto episcopal que viene a modificar la denominación de la actual ermita de la Antigua para proclamar el templo como santuario de Nuestra Señora de la Piedad.

Tras finalizar la eucaristía, el máximo representante de la cofradía, Juan Alba, mostró el agradecimiento de esta y del pueblo de Iznájar al obispo, quien seguidamente descubrió y bendijo una placa conmemorativa, que ha sido ubicada junto al acceso del camarín de la Virgen.