Doce horas después del restablecimiento del servicio de agua en Montilla, gracias a la puesta en marcha de una red secundaria que permitiera el suministro en la tarde de ayer, muchos vecinos de la ciudad continúan a la espera de poder volver a abrir los grifos de sus viviendas y contar con agua potable. Según ha señalado Aguas de Montilla, una pequeña fuga en la red de abastecimiento general ha impedido que la presión alcanzada en la vía alternativa sea suficiente para dotar de suministro a toda la ciudad.

"Desde las cinco de la mañana se está trabajando para remitir esa fuga que resta presión a la conducción que se está utilizando ahora para llegar a toda la población", ha explicado el gerente de la empresa mixta que gestiona el ciclo integral del agua, Lorenzo Cuenda. De esta forma, una vez se solvente este nuevo incidente, se volverá a incrementar "progresivamente" la presión -una labor gradual para evitar nuevas roturas de tuberías- con el objetivo de restablecer por completo el suministro.

En este sentido, el alcalde de Montilla, Rafael Llamas, ha confirmado que el Ayuntamiento mantendrá habilitados durante toda la jornada los dos puntos de suministro de agua no potable establecidos en la calle José Ortiz Sánchez, junto a la antigua parada de taxis del Paseo de las Mercedes, y en el Paseo de Cervantes, a la vez que se informará a lo largo de la mañana de nuevos puntos de recogida a través de camiones cisterna "que se mantendrán hasta que sea necesario".

La rotura de la tubería, detectada el pasado domingo en torno a las 13.15 de la tarde a la altura de Suministro Agrícolas Adamuz, generó una gran balsa de agua en la calzada que, no obstante, no impidió la circulación de vehículos. Con todo, el Ayuntamiento de Montilla movilizó a varios efectivos de la Policía Local para coordinar el tráfico rodado en la zona. Asimismo, el agua alcanzó también el área industrial bajo rasante que existe entre las instalaciones de Bodegas Gracia Hermanos y el Parque de Bomberos.

De forma paralela, Aguas de Montilla continúa con la reparación de la arteria principal de la red de abastecimiento, de más de treinta años de antigüedad. El alcance de la rotura de la tubería que conecta los depósitos de La Bernardina.