La Mesa del Regadío de Córdoba, integrada por la Junta de Andalucía, Asaja, UPA y COAG, ha alertado de que la sequía no ha acabado en la cuenca del Guadalquivir y ha exigido aumentar la zona de regadío en la provincia.

El delegado de Medio Ambiente de la Junta en Córdoba, Francisco Zurera, ha explicado en conferencia de prensa que la provincia cordobesa es la que más agua almacena en la cuenca, casi un 50 por ciento, pero la que menos riego tiene, a penas un 14,5 por ciento.

Ha anunciado que la Mesa del Regadío se va a citar con alcaldes, comunidades de regantes, agentes económicos y sociales y cooperativistas de las comarcas del Alto y el Bajo Guadalquivir, la comarca del Guadajoz y las zonas del río Genil y de Cabra para «trasladarles la necesidad de que Córdoba tenga más zona de regadío» porque es «clave, fundamental y posible».

«Córdoba tiene que estar al frente del mapa de agua de España porque es de vital importancia para la economía ligada a los territorios» a través de la agricultura sostenible, ha indicado el delegado.

El responsable de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) de Córdoba, Miguel Cobos, ha afirmado que «la sequía no ha terminado», pues la provincia tiene 400 litros por metro cúbico en el año hidrológico ahora, pero «hace dos semanas estábamos en ruina». Y es que la capacidad de agua embalsada solo es del 50 por ciento, «no mucho más que el año pasado» en toda la cuenca del Guadalquivir.

Además, Cobos ha remarcado que Córdoba tiene nada más que 118.000 hectáreas de regadío «cuando otras provincias andaluzas superan las 300.000 hectáreas, teniendo menos agua embalsada».

El representante de Asaja en Córdoba, Rafael Navas, ha informado de que la provincia es «la que más agua almacena, un 49,55 por ciento del total de la Cuenca, pero la que menos riego tiene, un 14,5 por ciento de su cultivo».

En este sentido, Navas ha pedido a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) «microembalses, balsas laterales para llenar en esta época, así como infraestructuras para el aprovechamiento de aguas subterráneas».

Por su parte, el representante de las cooperativas agroalimentarias de la provincia, Rafael Sánchez de Puerta, ha sentenciado que para «mantener» los pueblos «llenos de gente el agua es fundamental y, además, contamos con un nivel de consenso absoluto».