El malestar por la suspensión el pasado domingo del festejo taurino previsto con motivo de la Feria Real de Priego sigue en aumento, máxime cuando hoy martes, minutos después de abrirse las taquillas del coso taurino para proceder a la obligatoria devolución de las localidades, como estipula el Reglamento Taurino Andaluz, éstas se cerraban argumentando la falta de dinero para proceder a la citada devolución.

Desde primeras horas de la mañana fueron numerosos los aficionados que, armados de paciencia, habían aguardado a la apertura de la taquilla hasta la hora indicada, las 11.00. Tras atender a 16 personas y devolverse unos 6.000 euros, ya que varios de ellos presentaron un importante número de localidades, se cerraba la taquilla y se colocaba un escueto cartel en el que se indicaba "Volvemos mañana. Disculpen las molestias", sin más información.

Las aproximadamente 300 personas que aguardaban, muchas de ellas al sol, para recuperar el precio de localidad, no daban crédito a lo sucedido, criticando airadamente tanto a la empresa como al Consistorio prieguense, colaborador en la organización del festejo.

En el Capítulo II, artículo 33 del Reglamento Taurino Andaluz, en el que se recogen los derechos y obligaciones de los espectadores, en su punto 3 se indica que éstos tienen derecho a la devolución del importe del billete "en los casos de suspensión o aplazamiento del espectáculo o de modificación del cartel anunciado".

La devolución del importe del billete, continúa el citado artículo, "se iniciará desde el momento de anunciarse la suspensión, aplazamiento o modificación y finalizará cuatro días después del fijado para la celebración del espectáculo o quince minutos antes del inicio del mismo en el caso de modificación", prorrogándose automáticamente los plazos indicados "si finalizados los mismos hubiese, sin interrupción, espectadores en espera de devolución".

Según fuentes de la empresa, la devolución continuará mañana miércoles, no concretándose la hora de apertura de las taquillas. Precisamente, la empresa organizadora del festejo, De la Pleita a la Seda SL, en colaboración con el Consistorio de Priego, emitía ayer un comunicado sobre lo que consideran, "graves acontecimientos acaecidos por la suspensión del festejo taurino programado para el día 2 de septiembre de 2018", y que a juicio de la mercantil "ha supuesto un temerario desprecio a los espectadores que habían adquirido su localidad, una vulneración de los derechos de los consumidores, y una gravísima falta de respeto a la afición taurina en general, así como un gravísimo e irreparable daño patrimonial a esta empresa".

En una detallada cronología de lo sucedido en la mañana del domingo 2 de septiembre, el comunicado hace constar que a las 11.30 horas se personaron los representantes de los diestros José Antonio Ferrera San Marcos y José Garrido Santos, junto miembros de las diferentes cuadrillas de cada uno de los matadores intervinientes, "exigiendo en ese momento que se les abonase sus honorarios antes del sorteo de las reses, programado para las 12.00 horas, y en efectivo metálico, o de lo contrario no actuarían en el festejo".

Continúa el comunicado apuntando que la empresa puso a su disposición de los representantes de los toreros las liquidaciones y el medio de pago bancario que garantizaba el cobro de sus honorarios, haciéndoles ver que la legislación vigente en materia de prevención de blanqueo de capitales impide por imperativo legal el pago en efectivo de cantidades superiores a mil euros.

Ante tal situación y la imposibilidad legal de hacer abonar sus honorarios en efectivo metálico, a las 14.30 horas los representantes de los diestros José Antonio Ferrera San Marcos y José Garrido Santos, puestos en comunicación con sus representados, deciden, y así se lo comunican a la empresa, que se niegan a torear y que inmediatamente mandarán un parte médico que certifique una dolencia o enfermedad que les exima de su responsabilidad contractual con esta empresa. Certificados que la empresa define como "falsos", apuntando que se enviaron a las 14.15 horas, siendo firmados el día anterior por dos facultativos que se encontraban en localidades muy alejadas de Priego, en concreto Badajoz, mientras que los diestros y sus cuadrillas "se encontraban unos en las inmediaciones de Priego y los otros en la plaza de toros inspeccionando la corrida y en espera del sorteo".

Por su parte, el tercer espada del cartel, Ginés Marín, aceptó, por mediación de su apoderado, José Cutiño, las liquidaciones y medios de pago ofrecidos por la empresa, manifestando que estaría dispuesto a encerrarse él solo con los 6 toros y por lo tanto ser el único espada, opción que finalmente se desestimó por razones logísticas.

Ante esta situación, el comunicado continúa aclarando que a las 15.30 horas representantes de la empresa se reunieron con el delegado gubernativo y el presidente del festejo "para buscar una solución", aportando la empresa diversas opciones de ternas de matadores que pudieran actuar en el festejo para no provocar una suspensión, "pero puestos en contacto telefónico, resulta materialmente imposible por encontrarse todos ellos distantes de Priego".

Concluye el extenso comunicado añadiendo la empresa que por todo lo acontecido, "y ante los gravísimos daños económicos y morales que se la han infligido a esta empresa, al desprecio manifiesto a los espectadores y a la afición de la localidad de Priego de Córdoba", ya ha iniciado las acciones penales y de cualquier otra índole "contra las personas que pudieran resultar criminalmente responsables de las acciones de falsedad, amenazas y extorsión y que han arruinado la celebración del festejo taurino de la Feria de Priego de Córdoba".