El horno aparecido en las obras de la variante carretera A-331 serán trasladados por la Junta de Andalucía al yacimiento de Los Tejares de Lucena, según ha informado el Ayuntamiento lucentino. Actualmente el yacimiento de Los Tejares se encuentra parado, desde que el Consistorio solicitase hace dos años al Ministerio de Fomento financiación, con cargo al programa del 1,5% Cultural, para la restauración y conservación del alfar romano.

El proyecto contemplaba una inversión de 210.000 euros, de los cuales se pretendía que el 40 por ciento lo aportara el Ayuntamiento, según ha dado a conocer el alcalde lucentino, Juan Pérez. El yacimiento está pendiente de intervenir en tres espacios: la batería de hornos, la galería de secado y por último la cisterna.

El alfar romano de Los Tejares es una de las 22 factorías documentadas que se instalaron en el actual término municipal de Lucena durante la presencia de la civilización romana en la Península desde el siglo II a.C. y especialmente durante los siglos I y II d.C. Excavado en 1996 tras su hallazgo durante las obras de la depuradora de Lucena junto a la vía de servicio de la A-318, este yacimiento arqueológico es uno de los mejores ejemplos de factoría alfarera romana a nivel nacional.

Pendiente de un proyecto que inicie una nueva fase de actuaciones encaminadas ya a la restauración y puesta en valor desde el punto de vista turístico del yacimiento, el alcalde, Juan Pérez, ponía de manifiesto que «se trata de un enclave de singular importancia histórica que ahora debemos preparar para las visitas en general, al ser uno de los recursos turísticos de nuestra ciudad con mayor proyección». El primer edil señalaba que «sabemos que la apertura de Los Tejares requerirá de otras inversiones, para las que ya buscamos financiación entre los fondos Edusi y otras actuaciones cofinanciadas por las administraciones», aseguraba Pérez.

Respecto a las obras de la variante, van a buen ritmo y están siendo ejecutadas por la empresa General de Estudios y Proyectos tras diversos periodos de parálisis por la entrada en concurso de acreedores por una de la empresas adjudicatarias, en concreto Isolux-Corsán. Ahora desde la Consejería de Fomento de la Junta de Andalucía se ha convocado, a través del BOJA del pasado 13 de marzo, a dos reuniones los días 23 y 24 de marzo en el Ayuntamiento de Lucena con distintos dueños del suelo para informarles de las condiciones de la expropiación forzosa. Se trata de un reducido número de propietarios afectados por el paso de esta nueva infraestructura, en su totalidad fincas de olivar.