La firma montillana Hacienda Bolonia logró ayer un nuevo e importante reconocimiento a su corta pero exitosa labor como productores ecológicos. Y es que, apenas unas semanas después de haber conseguido uno de los premios Ecotrama de Oro del XVI Concurso Internacional de Calidad de Aceite de Oliva Virgen Extra Ecológico, la empresa que regenta la familia Gálvez Criado se coronó ayer, de la mano de su vino dulce Filigrana, en la decimoctava edición del Concurso Internacional de Vinos Ecológicos (Ecoracimo), que tuvo lugar en el castillo de El Gran Capitán de Montilla.

Los miembros del jurado de este concurso -que, en palabras del alcalde, Rafael Llamas, «es pionero en su sector» y destaca por el «reconocido prestigio de los catadores, así como por la inigualable calidad de las muestras que se presentan»- decidieron otorgar la Mención Especial Diputación de Córdoba, el máximo galardón del concurso, a un vino dulce elaborado con uvas pasas de la variedad Pedro Ximénez a partir de la cosecha 2012, con crianza en botas de roble americano por el sistema tradicional de criaderas y soleras.

Junto a Hacienda Bolonia, la empresa montillana Bodegas Robles también cosechó una medalla de oro por su Piedra Luenga Bio PX y dos platas por su Caprichoso y por el Piedra Luenga Bio Cream lo que, a juicio de Rafael Llamas, «confirma la excelencia de estas dos firmas montillanas que han apostado claramente por la producción ecológica de calidad».

En parecidos términos se manifestó el delegado territorial de Agricultura, Francisco Zurera, quien recordó que en España se dedican casi 100.000 hectáreas al cultivo de uva ecológica, «cifra que nos convierte en líderes en la producción de vino ecológico a nivel mundial».

Los componentes del jurado de Ecoracimo, formado por prestigiosos catadores especializados en vinos ecológicos y llegados desde diversos puntos de España, coincidieron en reseñar la calidad de las muestras recibidas en esta edición y animaron a las bodegas ecológicas a participar en este tipo de eventos que «contribuyen a promocionar la producción y el comercio de vinos bio».

En cuanto a la procedencia de las muestras remitidas por bodegas españolas, destacó la presencia de Castilla-La Mancha, que es la mayor productora de uva ecológica de España, seguida por Andalucía y Navarra.

«También se han presentado vinos de Aragón, Cataluña, Castilla y León, La Rioja, Comunidad Valenciana, Islas Baleares, Islas Canarias, País Vasco y Murcia», apuntó la portavoz de Ecovalia, que hizo hincapié en que, del conjunto de muestras, la que recorrió mayor distancia fue un vino enviado desde Suiza.

En esta ocasión, el desarrollo del concurso, organizado por Ecovalia en colaboración con la Junta de Andalucía, la Diputación de Córdoba y el Ayuntamiento de Montilla, se vio precedido por la firma de un convenio de colaboración entre Desirée Rubio, secretaria general de la asociación Valor Ecológico, y Francisco Robles, vocal de la Asociación Nacional de Bodegas Ecológicas, con la finalidad de «trabajar conjuntamente por la producción de vino elaborado con uva ecológica».

«El objetivo principal de Ecoracimo es, precisamente, servir de impulso a los agricultores ecológicos que trabajan la vid y a las bodegas que elaboran caldos biológicos certificados, apostando por el desarrollo de este sector y contribuyendo a su promoción», subrayó Desirée Rubio, en presencia de Rafael Llamas.