Las gestiones practicadas por la Guardia Civil en la investigación la empresa de organización de eventos que celebró la fiesta de fin de año en La Rambla en la que se superó el aforo, unidas a las inspecciones efectuadas en el local, la toma de declaraciones a asistentes a dicha fiesta y el estudio de las quejas presentadas en Facua y en otras oficinal del consumidor han confirmado «importantes irregularidades» ocurridas durante el desarrollo de la fiesta. Así lo ha informado el instituto armado en un comunicado en el que explica que la investigación continúa abierta y que ya ha entregado diligencias al juzgado de instrucción número 1 de Montilla, encargado del caso.

Los agentes apuntan a «un evidente exceso de aforo, que pudo producir un riesgo creado por el gran número de personas que accedió a la fiesta, al superarse ampliamente el aforo permitido de 750 personas, no solo el que por sí solo puede producir el sobreaforo, ya que las medidas de seguridad se establecen para ese número de personas, sino también las reclamaciones de varias personas que manifiestan que se podrían haber producido daños, llegando incluso a temer por su vida». De hecho, se llegaron a vender supuestamente 2.800 entradas.