Representantes del sector agrario formaron ayer, en Montoro, un frente común para reivindicar una mayor cuota de agua para el campo cordobés, ya que todo apunta a que la agricultura que tenga acceso a ella va a ser mucho más competitiva que la que no tenga. Fue en una reunión de la Mesa del Agua, convocada por el delegado de Agricultura, Francisco Zurera, en la que estuvieron presentes las organizaciones agrarias Asaja, Uaga-Coag, UPA, la Federación de Cooperativas, las alcaldesas de Montoro, El Carpio y Algallarín, los alcaldes de Villafranca y Villa del Río, comunidades de regantes y agricultores.

Zurera dijo que la cuenca del Guadalquivir es deficitaria, quedando constatado en la Mesa del Regadío, «constituyendo unos datos que no son justos, ya que necesitamos poner más hectáreas de riego». Desde el año 1987 la agricultura cordobesa ha dejado de utilizar 228 hectómetros cúbicos de agua, «con lo que echando cuentas, al 2018 podríamos regar 150.000 hectáreas de olivar», añadió Zurera. Así, el delegado matizó que se han reunido con diferentes entidades para que todos aúnen fuerzas «ya que Córdoba almacena casi el 50% del agua de Andalucía, y solo tiene en su conjunto el 16% con respecto a las provincias limítrofes». La comparó con Jaén, que almacena un 37% del agua y tiene un 40% de regadío en su propiedad, «y Sevilla, con un 17% solo, un 42% de agua para regar». Concretamente, de las 352.000 hectáreas de olivar de Córdoba solo tiene el 14% de regadío.

Los diferentes representantes de las organizaciones agrarias se pusieron también a disposición del sector y manifestaron que se podrían construir microembalsaes o balsas laterales junto al Guadalquivir para que el agua repercuta en la agricultura local y no se pierda en el mar.

También reiteraron que pedir agua no resta a otros territorios, ya que aducen se desaprovechan muchos hectómetros, y pidieron que se agilizaran la puesta en valor de los acuíferos.