Varios fragmentos de un cometa impactaron en la madrugada del viernes contra la atmósfera originando bolas de fuego, una de ellas «casi tan brillante como la Luna llena y que pudo ser vista en gran parte del país y captada en el Complejo Astronómico de la Hita, en Toledo. Los fragmentos se habían desprendido del cometa 169/Neat e impactaron a unos 90.000 kilómetros por hora contra la atmósfera. Cada uno de los fragmentos originó una «brillante» bola de fuego, la más luminosa hacia las 3.29 horas que sobrevoló la provincia de Córdoba. La bola se inició a unos 104 kilómetros de altura y avanzó en dirección noreste hasta extinguirse a unos 75 kilómetros de altitud, cuando se encontraba casi sobre la vertical de Baena.

El evento también fue registrado desde el observatorio de Calar Alto (Almería), así como en las provincias de Sevilla y Huelva.