Superar las 16.000 visitas del pasado año. Ese es el reto que se han marcado el Ayuntamiento de La Rambla y la Asociación de Artesanos Alfareros de cara a la 88ª edición de la Feria de Cerámica y Alfarería, rebautizada como Enbarro. La cita, que arrancará el próximo jueves y se extenderá hasta el domingo, contará con varias novedades, entre las que destaca una zona dedicada a la innovación, una «idea pionera» tal y como resaltó ayer el alcalde, Alfonso Osuna.
El primer edil hizo hincapié en el «esfuerzo» que se realizó en la pasada edición al apostar por un nuevo formato y por otra fecha de celebración, decisiones que, a juicio de Osuna, «marcaron un antes y un después» que, a la vista de los resultados, superó «con creces» las expectativas de los organizadores. «Con el esfuerzo que se hizo hemos cambiado mentalidades, conceptos y la actitud de muchas personas que se han creído de verdad el proyecto», aseveró ayer el alcalde.
Como en ediciones anteriores, Enbarro volverá a contar con el respaldo económico del Instituto Provincial de Desarrollo Económico (Iprodeco). Su responsable, Ana Carrillo, subrayó ayer la antigüedad de la feria -la más veterana de cuantas se celebran en España- y su reconocimiento como Fiesta de Interés Turístico.
«Ha sabido consolidarse y adaptarse a los nuevos tiempos y las nuevas realidades para ser más atractiva, más participativa y poder seguir siendo visitada», apuntó Carrillo, quien se mostró convencida de que Enbarro es «una feria que marca la identidad de La Rambla sin olvidar su importancia económica, de ahí que Iprodeco preste su apoyo».
En la actualidad, La Rambla cuenta con unos 80 talleres, entre alfareros y ceramistas, lo que convierte al municipio en uno de los mayores clúster productivos artesanales de Andalucía. No en vano, el sector genera unos 200 puestos de trabajo directos y otros tantos indirectos y en torno al 70 por ciento de su producción se exporta a terceros países.
Por su parte, la presidenta de la Asociación de Artesanos, Catalina Alcaide, avanzó que el recinto ferial de La Minilla contará con una carpa de 2.200 metros cuadrados que se dividirá en varias zonas: por un lado, los 24 estands de alfarería y cerámica y, por otro, los de industria auxiliar, restauración y ocio.
El presupuesto de esta edición asciende a 42.000 euros, de los cuales la Diputación -a través de Iprodeco- aporta 12.400 euros, el Ayuntamiento de La Rambla la cantidad de 20.000 euros y el sector ceramista de la localidad unos 9.600 euros.
