Hasta el último minuto de vida, Teresa Córdoba Prieto ha sido una activa mujer de empresa y devota carmelitana. A los 90 años ha fallecido, dejando una larga y ejemplar trayectoria ligada a Destilerías Duende y el Museo del Anís, a las que ha dedicado toda su vida y de la que era Presidenta de Honor. Una larga trayectoria que ha compaginado con distintos cargos en la cofradía de la Virgen del Carmen, Patrona de Rute, de la que fue camarera durante más de 30 años.

Su sobrino y actual director del Museo del Anís y destilerías Duende, Anselmo Córdoba Aguilera, reconocía que “con la muerte de mi tía se me va una compañera de trabajo, una amiga y una de las personas que más me han querido”. Palabras que dejan patente la estrecha colaboración entre tía y sobrino al frente de esta centenaria destilería ruteña y los proyectos innovadores que siempre han emprendido.

Con 90 años, a diario pasaba por la destilería para conocer la marcha de la empresa. Muy atenta también a los meses de la campaña de Navidad, atendiendo personalmente a no pocas visitas a las instalaciones del Museo del Anís. Toda una vida dedicada a la empresa familiar, que conoció siendo niña de la mano de su padre, el empresario Anselmo Córdoba Barrera. Su tesón y constancia le llevaron a tomar las riendas del negocio, introduciendo nuevos destilados como el vodka y la ginebra, en la década de los sesenta del siglo pasado, reforzando así el mercado del anís.

Precisamente la capilla ardiente ha estado instalada este sábado en las propias destilerías Duende, en una de las salas del Museo del Anís. Rodeada de su familia, sus sobrinos Francisco Javier y Anselmo Córdoba, su cuñada Rosario Aguilera y su ahijada Ana Lazo. Lugar hasta el que se han trasladado numerosos familiares, amigos, vecinos, así como empresarios, representantes de las cofradías y de la corporación municipal. El alcalde de Rute, Antonio Ruiz, ha destacado la figura de Teresa Córdoba como empresaria y emprendedora. El féretro ha estado cubierto por el escudo de la orden del Carmen.

Justo en este 2019, se cumplen 25 años de la inauguración del Museo del Anís, que significó una apuesta exitosa por unir la tradición de las destilerías y el turismo. En los últimos años recibió varios reconocimientos como el Premio Villa de Rute, o la calle Empresaria Teresa Córdoba, que le dedicó también el Ayuntamiento. Por su parte, la cofradía de la Virgen del Carmen la nombró Camarera de Honor.