Dos agentes de la Policía Nacional de la Comisaría de Lucena-Cabra han salvado a un bebé de catorce meses que se encontraba inconsciente y sin respiración. Los Policías le practicaron la maniobra de Heimlich y un masaje cardiaco, consiguiendo que recuperara poco a poco la respiración y continuara con vida hasta su traslado a un centro hospitalario.

Según informa la Policía en una nota de prensa, los hechos tuvieron lugar sobre las 18:00 horas del pasado viernes cuando los agentes se encontraban patrullando por la localidad de Lucena, concretamente por la carretera de Cabra, y fueron requeridos por los ocupantes de otro vehículo quienes pedían auxilio de manera angustiada. Tras detener ambos vehículos, los agentes observaron como del coche se bajaron varias personas con un bebé inconsciente en sus brazos, por lo que los agentes actuaron sin demora. Uno de los policías se dirigió rápidamente hacia el vehículo para comenzar su asistencia, mientras que el otro solicitaba la asistencia de los servicios médicos a través de la Sala del 091.

LOS OJOS CERRADOS Y SIN REACCIONAR

El agente comprobó que la niña, de un año de edad aproximadamente, tenía los ojos cerrados y no reaccionaba a los estímulos. Tras verificar la ausencia de pulso y que no respiraba, comenzó la maniobra de Heimlich ante la posibilidad de que se hubiera atragantado y tuviese las vías respiratorias obstruidas. Tras colocar a la menor en posición de seguridad, el agente golpeó sobre las escápulas comprobando como empezaba a reaccionar y expulsaba varias flemas por la boca, bajando su mandíbula con la mano e introduciendo los dedos para que no se ahogara.

En ese momento, el bebé reaccionó con un ronquido y comenzó a respirar levemente, situación que se prolongó hasta la llegada de los servicios sanitarios quienes estabilizaron al bebé hasta su traslado al centro hospitalario de referencia.

La rápida actuación de los servicios policiales y sanitarios fue efectiva, logrando salvar la vida del bebé, que tras pasar varias horas en el hospital, fue dado de alta en perfecto estado.

Uno de los agentes, Antonio Pacheco, ha señalado esta mañana que “fueron momentos de angustia, cuando en la zona cercana a la entrada del Polígono de la Viñuela , los padres, una pareja muy joven de nacionalidad rumana, acompañados de varios familiares se bajaban del vehículo con la niña en los brazos pidiendo auxilio".

Por su parte, su compañera Azahara López, que fue la que consiguió reanimar a la niña, manifestaba que “ante la urgencia y a la espera de los servicios médicos, cogí a la niña y comencé a realizarle la maniobra de Heimlich , le agarré la mandíbula con la mano y empecé a golpearle en la espalada y de buenas a primeras hizo un ronquido y empezó a expulsar flemas que se las retiramos con los dedos y la niña empezó a respirar y notamos que el pecho se movía, comunicándoselo a los padres para que se tranquilizaran, para, posteriormente, hacerle un masaje cardíaco". Señala Azahara que “todo fue muy rápido y cuando llegaron los médicos con la ambulancia, se lo explicamos para que actuasen en consecuencia, para trasladar a la niña al Hospital Infanta Margarita de Cabra".