La necesidad de que la sociedad en su conjunto tome conciencia y reconozca que uno de los mayores patrimonios naturales de la Humanidad es la geología y la diversidad, así como el desarrollo económico asociado a estos valores, fue uno de los aspectos que ayer se pusieron sobre la mesa en el transcurso de la jornada celebrada en las instalaciones del jardín micológico La Trufa, de Priego, con motivo del 40 aniversario del comité español del Programa Internacional de Ciencias de la Tierra y Geoparques de la Unesco. En los prolegómenos de este encuentro, el director general de Gestión del Medio Natural y Espacios Protegidos, Javier Madrid Rojo, indicó que una de las líneas de trabajo de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio es que la población de las localidades ubicadas en un geoparque o en el entorno de estos "entienda esta geodiversidad como algo propio y como un instrumento de desarrollo económico del territorio". En este sentido, Madrid añadió que si las administraciones no son capaces de que la que la sociedad que vive en un geoparque entienda lo que son e implican estos valores, "es imposible que podamos obtener un uso sostenible, aprovechado, útil y racional que nos permita aportar algo más a la economía".

Junto a Javier Madrid, el acto inaugural contó con la participación del delegado territorial de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, Francisco de Paula Algar, del presidente del comité nacional español y de la subcomisión del Programa Internacional de Ciencias de la Tierra y Geoparques (PICG) de la Unesco, José Ignacio Valenzuela Ríos, y de la secretaria del comité nacional español del PICG, Rosa Mediavilla, que tras sus intervenciones dieron paso a las conferencias y presentaciones que conformaban el programa de este jornada, que finaliza hoy sábado con una visita al geoparque de las Sierras Subbéticas.