La Coordinadora de Trabajadores de Andalucía, CTA, ha anunciado que quiere crear secciones sindicales en la campaña citrícola, tanto en campo como en almacén. Sobre el convenio del campo, señalan que están estudiando impugnar determinados aspectos del documento que consideran ilegales. Indican que sigue apareciendo en el texto «la exigencia de 170 peonadas al año en la misma empresa durantte tres años, o cuatro alternos, para alcazar la figura de fijo discontinuo». Afirman que «es un imposible», añadiendo que «además, saben que es ilegal».

José Parra, Francisco J. Caraballo y Candy Zapata, de CTA- Palma, manifiestan que el convenio se ha alcanzado de espaldas a los trabajadores, dicen que «los trabajadores estamos considerados una subclase». Denuncian además que se quiere implantar un carnet profesional señalando que «el objetivo es tener que pasar bajo los dominios de CC.OO. y UGT para que sigan recibiendo dinero público».