La celebración de la Misa de Penitentes de la Cofradía de la Santa Cena y Nuestra Señora del Amor en la iglesia de San José de Puente Genil este Lunes Santo, y la presencia de cinco hermanos en el interior del templo, provocó que tuvieran que presentarse agentes de la Policía Local y la Guardia Civil, alertados por unos vecinos ante la emisión de la eucaristía, aparentemente en directo. Por ello, pasadas las seis de la tarde, varias patrullas se personaron en la iglesia, pero al llegar se encontraron con las puertas cerradas, ya que la grabación se había realizado por la mañana. En las imágenes emitidas por la televisión local intervienen tres hermanos (uno de ellos el cofrade mayor) y dos más vestidos con el hábito de la cofradía. La Policía Local ha confirmado la apertura de un expediente de denuncia a los asistentes al culto por el supuesto incumplimiento del decreto de alarma por el coronavirus.

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Así, a partir de ahora será la Subdelegación del Gobierno la que decida si incoa la apertura del expediente y, posteriormente, si aplica o no una sanción por estos hechos. En este caso, al tratarse de una supuesta desobediencia a la autoridad, la multa oscilaría entre los 600 y 30.000 euros.

Los hechos han traído consigo un reguero de comentarios en redes sociales y grupos de whatsapp en los que se debate sobre el confinamiento, la libertad de culto y si se cumple o no el decreto por el estado de alarma. La Cofradía, de momento, no ha querido realizar ninguna declaración al respecto.

Por su parte, la Asamblea local de IU y su grupo de concejales en el Ayuntamiento de Puente Genil entiende que "las condiciones en que se celebró un acto litúrgico en el día de ayer, con la presencia de más personas de las estrictamente necesarias, nos abochorna, máxime tratándose de una institución tan influyente como la eclesiástica". Si, además, "en tal manifestación de falta de civismo participa el gobierno municipal a través de su concejala de Igualdad, nos parece una infamia". Concluyen diciendo que "los políticos no estamos al margen de la Ley, no debemos ser objeto de privilegio alguno, sino ejemplo de todo lo contrario, del máximo rigor en el servicio público".