La Residencia-Hogar para Mayores San Rafael ha registrado dos nuevos fallecimientos a causa del coronavirus, según el último balance que acaba de hacer público el alcalde de Montilla, Rafael Llamas. El centro que gestiona la congregación de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, junto a la Fundación Cuidar y Curar, registró este sábado la muerte de un hombre de 81 años, natural de Puente Genil, que residía en el asilo desde hacía algo más de un año y que representaba, hasta ese momento, la cuarta víctima mortal por coronavirus.

Sin embargo, según la información que acaba de facilitar Rafael Llamas, los test rápidos a los que fueron sometidos este sábado la totalidad de residentes, trabajadores y monjas del centro arrojaron 33 positivos entre residentes, siete entre integrantes de la congregación de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados y ocho entre trabajadores del centro. A ello se suman seis fallecidos -dos más de los que se tenía constancia hasta ahora-, lo que elevaría hasta 54 las personas afectadas por el covid-19.

Tal y como ha venido informando este periódico, el Hogar sufrió el pasado 4 de abril la pérdida de una integrante de su comunidad que atendía la portería de las instalaciones, situadas en uno de los extremos de la Barriada de El Gran Capitán-. Igualmente, el centro había registrado antes el deceso de otras dos usuarias, vecinas de la localidad.

Los dos primeros fallecimientos que afectaron de lleno a la Residencia-Hogar para Mayores San Rafael tuvieron lugar tan solo nueve días después de detectar entre sus usuarios el primer positivo por covid-19. Tal y como adelantó este periódico, la primera persona que resultó infectada por coronavirus fue trasladada en la tarde del 26 de marzo al Hospital Comarcal de Montilla, donde quedó ingresada, mientras que algunos residentes más presentaban síntomas compatibles con la epidemia, por lo que se decidió aislar a una veintena de ancianos por haber tenido contacto con el primer caso positivo de este centro.

Desde ese momento, el Ayuntamiento de Montilla alertó de la situación a la dirección del Hospital Comarcal de Montilla y solicitó, a través de la Subdelegación del Gobierno de España en Córdoba, que los efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) que se habían desplazado a la localidad colaborasen, como así fue, en la desinfección del Hogar San Rafael.

Precisamente, este Viernes Santo y el sábado, militares del Regimiento Acorazado Córdoba n.º 10, integrado en la Brigada Guzmán el Bueno X, con base en Cerro Muriano, colaboraron en la desinfección contra el coronavirus de la residencia-hogar. La unidad mantiene una estrecha vinculación con Montilla gracias a la Cofradía Penitencial de la Santa Vera Cruz, de la que la unidad es Hermano Mayor Honorario desde el 10 de febrero de 2008, cuando tuvo lugar en la Parroquia de Santiago Apóstol el nombramiento oficial durante la Función Principal de Regla con la que culminaba el Quinario de la cofradía.