Desde la Junta se mantiene que los ataques de lobos son puntuales y que son indemnizados. Se pretende con esta medida que los ganaderos y la población no rechace la especie que se encuentra en peligro crítico, es decir, presenta el mismo riesgo de desaparición que la avutarda, el águila imperial o el milano real. En la provincia, el lobo se extiende por Villaviciosa, Espiel, Posadas, Hornachuelos, Montoro o Cardeña. De la concienciación, y de la celeridad de las ayudas, depende que Córdoba se mantenga como uno de sus últimos refugios.