Sin llegar a la situación extrema de provincias como Zamora o Soria, donde el fenómeno de la que se ha dado en denominar España vaciada es una realidad más que constatada, los datos de la última revisión del padrón municipal han puesto de manifiesto la creciente despoblación de un importante número de municipios de la provincia de Córdoba.

Teniendo en cuenta el parámetro de los 12,5 habitantes por kilómetro cuadrado que fija la Unión Europea y que el Ministerio de Política Territorial cita como indicador de territorios en riesgo de despoblamiento, casi una cuarta parte de los municipios de Córdoba se encuentran en esta situación.

En concreto, y según los datos del Instituto Andaluz de Estadística, los municipios de la provincia que no alcanzan este mínimo de densidad de habitantes son actualmente Alcaracejos, Belalcázar, Los Blázquez, Cardeña, Conquista, Espiel, Fuente Obejuna, La Granjuela, El Guijo, Hornachuelos, Obejo, Santa Eufemia, Torrecampo, Valsequillo, Villanueva del Duque, Villaviciosa y El Viso, la mayoría de ellos concentrados en el norte de la provincia.

En este sentido, y sin llegar al nivel de alarmismo que puede provocar contar con una veintena de municipios en riesgo de desaparición a corto y medio plazo, el catedrático de Geografía Humana de la Universidad de Córdoba, José Naranjo, en el desayuno coloquio organizado en diciembre por Diario CÓRDOBA sobre la España vaciada, afirmaba que hablar de este fenómeno en la provincia «no es posible, porque hay una serie de problemas puntuales, locales, que permiten hablar de España vaciada, pero no en su conjunto, ya que hay situaciones críticas pero otras que invitan al optimismo, porque hay pueblos que están creciendo».

Para el profesor Naranjo, la clave de este problema se encuentra en la edad de los grupos de población y en el crecimiento vegetativo, afirmando que tenemos «una Córdoba envejecida, porque los nacimientos y las defunciones no tienen una correspondencia que permita crecer o mantenerse».

A este respecto, los datos por comarcas del crecimiento vegetativo (diferencia entre nacimientos y defunciones) reflejan que en lo que respecta a la última década, en siete de ellas este saldo es negativo, mientras que únicamente en el valle medio del Guadalquivir el crecimiento vegetativo ha sido positivo, al registrarse 32 nacimientos más que defunciones. Por el contrario, en el Alto Guadalquivir se registraron 76 defunciones más que nacimientos; 248 en Campiña Sur, 407 defunciones más que nacimientos en Córdoba; 83 en Guadajoz-Campiña Este; 221 en los Pedroches; 375 defunciones más que nacimientos en la Subbética, y 243 en el Valle del Guadiato.