Durante los últimos días ha sido noticia el Ayuntamiento de Baena porque su equipo de gobierno ha estado dirigiendo el municipio sin cobrar sus retribuciones. Algo que por fin se ha resuelto en la última sesión plenaria celebrada el pasado jueves. Pero no es este el único caso que se da en la provincia, pues en El Carpio tampoco está recibiendo sus retribuciones, dos situaciones inusuales que son fruto de la falta de entendimiento entre los distintos grupos que conforman las correspondientes corporaciones municipales.

Así, en Baena, las retribuciones se aprobaron el pasado jueves tras cuatro meses y medio sin alcanzar un acuerdo. Este asunto sólo se había debatido en Pleno el pasado mes de septiembre ya que en julio se quedó sobre la mesa. Ahora se ha llevado por urgencia una vez que se alcanzó un acuerdo con el PSOE que daba su abstención a cambio de la Alcaldía de Albendín y una propuesta de sueldos muy parecida a que los socialistas llevaban en la enmienda del mes de septiembre y que retiró.

Hace un mes Ciudadanos, que gobierna en coalición con el PP, rechazó la propuesta de retribuciones presentada por el PP. El jueves, tras llegar a un acuerdo los dos grupos políticos del equipo de gobierno, Ciudadanos retiró en el pleno una enmienda sobre la retroactividad de los sueldos, algo que habría podido romper de nuevo ese acuerdo a pesar de que en el mes de septiembre el secretario del Ayuntamiento ya explicó que «puede haber sanciones con Hacienda» y el jueves insistió en que infringía la normativa. Salvado este tema y una vez que la alcaldesa, Cristina Piernagorda (PP), firmaba antes del pleno un decreto por el que nombrada alcalde de Albendín al candidato del PSOE, una reivindicación tanto de los socialistas como de Iporba, el pleno aprobaba las retribuciones. Tanto IU como Iporba votaron en contra. Ahora, la alcaldesa se enfrenta al reto de aprobar los presupuestos y no parece que vaya a ser un camino fácil.

Por su parte, en El Carpio, la alcaldesa, Desirée Bevanides (PSOE), lleva dos meses sin cobrar sueldo. En la última comisión, propuesta por el PP, no lograron ponerse de acuerdo las tres fuerzas políticas. El portavoz de IU, Francisco Ángel Sánchez, dijo que «como alcaldesa cobraba más que yo». Al hilo de ello, Benavides comentó que «cuando comenzamos la legislatura de 2015 ya me bajé el sueldo 200 euros para poder subirlo a la primera teniente de alcalde, que cobraba entonces poco para la responsabilidad que tenía. Las subidas propuestas en estos años corresponde al 6% de los funcionarios del Estado». La alcaldesa carpeña indicó ayer que «no tiene más sentido que seguir IU y PP con la persecución personal, y es muy triste para el trabajo que como responsables públicos tenía que prevalecer, que son aquellos intereses del pueblo y no las inquinas personales». Añadió que «nosotros pretendemos seguir cobrando lo mismo que en el 2015, pero con las subidas que se apliquen por el Estado». Benavides matizó que «también estamos expuestas a bajadas o congelaciones. Durante el mandato de Sánchez no se pagaron las pagas extraordinarias por el Estado y se fueron dando proporcionalmente en los años que yo era alcaldesa. Eso Sánchez lo cobró a posteriori por solicitud, por lo que no entiendo cómo puede ahora estar en contra de eso». Así. la alcaldesa piensa que «siguen con la presión y la moción de censura encubierta».