El Informe de seguimiento de las recomendaciones incluidas en la fiscalización de determinadas áreas del Ayuntamiento de Posadas por la Cámara de Cuentas describe una situación de caos en su plantilla de personal, que en la mayoría de los casos ha sido cubierta mediante procedimientos discrecionales.

Por ello, la Cámara de Cuentas recomienda en sus conclusiones al Ayuntamiento maleno "una planificación ordenada y adecuada de sus recursos humanos", la elaboración y aprobación de una relación de puestos de trabajo que responda a una necesidad estructural y que estos se cubran "mediante un procedimiento de selección pública de acuerdo con los principios constitucionales de igualdad, mérito y capacidad", informa Efe.

El informe, referido al período 2011-2016, incluido en el plan de actuaciones de 2018 y que ha publicado este jueves el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA), reitera situaciones ya denunciadas en uno anterior, de 2011, y sitúa en 2016 una plantilla municipal con 64 trabajadores, veinticinco de ellos con la condición de funcionarios y cuarenta con la de personal laboral, aunque en el anexo presupuestario la posibilidad de contratación se eleva hasta los 73.

El alcalde de Posadas, Emilio Martínez (PSOE), ha dicho este jueves a Efe que el Ayuntamiento viene trabajando desde que preside el gobierno municipal, a partir de 2015, "de la mano de la Cámara de Cuentas" para "subsanar las deficiencias" puestas de manifiesto en la medida de la capacidad material municipal y de sus recursos humanos y que muchas de las que cita el informe ya están superadas.

La fiscalización de la Cámara de Cuentas deja al descubierto que el Ayuntamiento de Posadas incluyó en su presupuesto a cinco trabajadores contratados con cargo a programas financiados por otras administraciones y que, en cambio, hay al menos tres trabajadores de su personal laboral que acumulan una antigüedad superior a los diez años cuyos puestos no aparecen en la plantilla presupuestaria.

El desbarajuste constatado por el órgano fiscalizador de la Junta de Andalucía se adentra en la forma de acceso de los trabajadores al empleo municipal. El 73 por ciento del personal laboral, cuarenta personas, tienen la condición de indefinidos, cuatro de ellos mediante sentencia judicial por despido improcedente, uno mediante convocatoria pública, tres por concatenar durante más de seis años contratos por obra o servicio determinado y 36 por contratos temporales que se convirtieron en indefinidos.

La Cámara de Cuentas pone de manifiesto que la "debilidad del control interno", que ha impedido acceder al expediente personal a una muestra solicitada de once de estos 36 trabajadores, "ha impedido examinar la documentación relativa a la forma de acceso a la corporación y si se llevó a cabo mediante procedimientos selectivos que cumplían los principios de igualdad, mérito y capacidad".

De hecho, el informe pone énfasis en que "la única documentación facilitada ha consistido en un informe de vida laboral, en el que se observa que acumulan una elevada antigüedad en la corporación", por lo que entiende, conforme al Estatuto de los Trabajadores, que se trata contratos hechos en fraude de ley y que deben ser considerados como fijos.Los otros siete trabajadores laborales acumulan más de diez años con contratos temporales, lo que les colocaría en la misma situación que los anteriores, según la Cámara de Cuentas.

Pero el informe del organismo fiscalizador no solo pone en evidencia deficiencias en la gestión de personal en el Ayuntamiento de Posadas, sino que también cuestiona elementos de su control interno, en la provisión de cantidades para los litigios judiciales que tenía abiertos en el período inspeccionado, en el cumplimiento de los plazos para la rendición y la tramitación de sus cuentas y en la formulación del presupuesto anual, entre otras.