Cabra y Monturque podrán acogerse a las ayudas extraordinarias de la Junta para financiar los daños en equipamientos e infraestructuras municipales afectadas por la lluvia y el viento. Así lo avanzó ayer la delegada del Gobierno andaluz, Esther Ruiz, quien visitó las zonas que han resultado más dañadas el pasado fin de semana junto al presidente de la Diputación, Antonio Ruiz, y el diputado de Cooperación con los Municipios y Carreteras.

Esther Ruiz trasladó el apoyo del Gobierno autonómico y se puso a disposición de los ayuntamientos «para trabajar de manera coordinada y volver a la normalidad», señalando también que desde la Junta se han ofrecido «todos los medios materiales y humanos necesarios».

Por su parte, el presidente de la Diputación mostró la colaboración de la institución provincial y reclamó a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir «que actúe y limpie los cauces». Respecto a Monturque, Antonio Ruiz anunció que uno de los puntos que se abordarán en el Pleno de mañana será la construcción de un puente sobre el río Cabra, que contará con un presupuesto de 655.000 euros y «va a suponer que se prevengan este tipo de desgracias», señaló. La alcaldesa del municipio de la Campiña Sur, Teresa Romero, agradeció la «respuesta inmediata de la Diputación» y mostró su indignación con la CHG por la «situación de abandono de los cauces y ríos a su paso por Monturque, puesto que el río Cabra no tiene mantenimiento a lo largo del año».

Por su parte, el alcalde de Cabra, Fernando Priego, elogió el trabajo realizado en carreteras como la de la Fuente de las Piedras y en la anegación de la carretera de Cabra a Lucena en el paraje de la Huerta de la Alcantarilla, donde en la noche del sábado al domingo tuvieron que ser evacuadas 35 personas. También informó de que se ha puesto en contacto con el subdelegado del Gobierno y le ha trasladado la necesidad urgente de limpiar el cauce del río Cabra.

De otro lado, en Palma del Río las huertas de Carrascalejo y Pedro Díaz se quedaron sin suministro eléctrico. Aunque Carrascalejo recuperó la electricidad a media mañana, no fue así en Pedro Díaz, donde hay que esperar que baje el río para entrar, ya que el enganche está en Saetilla, entre Pedro Díaz y La Graja.

El pico de la crecida entró en el casco urbano de Palma pasada la una de la madrugada por La Alegría, colándose por La Chirritana, al final del Callejón del Junco, donde hay dos viviendas, y también por la trasera del Río Seco, camino del Molinillo, Gloria y Gálvez.

El Ayuntamiento, que ayer desactivó el plan de emergencia decretado el domingo, trabaja ya en el operativo de limpieza contando con servicios de la Diputación y vehículos y operarios municipales.

El temporal ha dejado pérdidas considerables en el sector citrícola. Francisco González, presidente de la Comunidad de Regantes de la Margen Derecha del Genil y secretario de la Cooperativa Agrícola de Regantes, relata que durante tres semanas «no se ha podido entrar en las huertas a recolectar naranja por la lluvia». Además, el viento ha tirado bastante producción y ahora con la crecida del río tampoco se puede entrar a cortar naranjas. En este escenario, y poniendo como ejemplo su huerta de cítricos, indica que hoy (por ayer) la ha peritado el seguro y «tengo una pérdida de un 40% de la producción, y como mi caso hay muchos».

En Lucena se ha producido la rotura del colector que conduce las aguas residuales a la depuradora, lo que ha provocado que vierta los residuos directamente al río. El concejal de Obras, José Cantizani, explicaba que las obras se adjudicarán hoy mismo y el inicio de los trabajos será lo antes posible. Por otro lado, el río Lucena volvió a desbordarse en la zona de El Cascajar durante la tormenta de ayer tarde y se inundó La Torca.