El Ayuntamiento de Hornachuelos ha iniciado hace unos días la actividad arqueológica prevista en el nuevo proyecto que acomete con el Plan Estratégico de Reactivación del Casco Antiguo (Perca), por el cual se construirán viviendas sociales en el antiguo hospital de la Caridad. Un proyecto que, dentro de los objetivos de puesta en valor del patrimonio local, prevé integrar los elementos histórico-artísticos en la nueva construcción.
Según ha explicado el Ayuntamiento, el antiguo hospital de la Caridad, situado en calle Béjar, 1-3, pertenecía a una fundación, cuyos patronos querían disolver para dejar el inmueble al Ayuntamiento, y en ello se ha venido trabajando entre el equipo de gobierno y la fundación en los últimos cinco años, de tal manera que el edificio forma parte hoy del inventario de muebles municipal.
Su testamentaria, Carmen Santiago, donó el inmueble con la condición de que se destinara a un fin social. Por ello, y junto a los fines del Perca, el equipo de gobierno decidió destinar este inmueble a viviendas protegidas en régimen de alquiler, de un dormitorio, para destinarlas a un perfil muy concreto de la población: personas mayores o de movilidad reducida que puedan necesitar de ciertos servicios (asimilable a viviendas tuteladas), y a jóvenes que se emancipen y necesiten de un alojamiento transitorio hasta poder optar a una vivienda familiar.
El proyecto tiene un presupuesto de más de un millón de euros para 16 viviendas y salas de usos múltiples. La financiación se ha conseguido a través de subvenciones del Gobierno central, la Junta, la Diputación y el propio Ayuntamiento.
El pasado 20 de agosto dio comienzo la actividad arqueológica preventiva, con los trabajos de documentación arqueológica y el estudio paramental de este inmueble emblemático para la localidad, que cuenta con al menos cinco siglos de historia. «Es muy importante para el Ayuntamiento integrar la historia y el valor patrimonial del edificio al nuevo uso que se pretende», señalan desde el Consistorio.
Por el momento, en esta primera fase de intervención arqueológica todo parece indicar que se han encontrado los restos de una casa-palacio del siglo XV-XVI, relacionada con la familia que le da nombre a la calle, es decir, con los duques de Béjar.
