La delegada de Turismo del Ayuntamiento, Isabel Albás, abogó por llevar a cabo una inspección contra las viviendas turísticas ilegales en la capital, dado que a finales de 2018 había 1.200 inmuebles de este tipo sin regularizar, y defender tanto a las legales, unas 1.300, como a los vecinos afectados por esta situación. En una entrevista con Europa Press, explicó que «se trabajará en inspeccionar», dado que «tiene que ser perfectamente compatible que los vecinos puedan vivir con la vivienda turística». Para ello, consideró que «es necesario que a nivel nacional se haga una ley de viviendas turísticas para regularizar», y luego trasladarlo al ámbito autonómico y local, porque, según remarcó, «los vecinos del casco histórico tienen todo el derecho a vivir en paz y tranquilidad». A su juicio, es «importante inspeccionar y controlar que realmente las viviendas turísticas cumplen con la normativa», entre otras circunstancias, para hacer frente a «la masificación». Sobre la implantación de una tasa turística, apuntó que «no es una prioridad, ni para Córdoba, ni para el turismo», de forma que «hay que ponerse a trabajar en lugar de cobrar, cobrar y cobrar».