Manuel C.P., el hombre hallado muerto el viernes en una vivienda de la plaza de la Fuenseca, y su pareja, Carmen B.R., que se encuentra en prisión provisional como supuesta autora del asesinato, se habían denunciado mutuamente por agresión. Según informaron ayer fuentes judiciales, no solo la mujer había llevado al hombre ante un juez por malos tratos como ya había trascendido, sino que también él la denunció por una supuesta agresión cometida el 30 de septiembre del 2014. El juez acordó el 1 de octubre, como medida cautelar que afectaba a los dos, orden de alejamiento mutuo. Posteriormente, el 16 de octubre se celebró el juicio rápido por estos hechos en el juzgado de lo Penal 1 pero, ante la incomparecencia de ella y que el hombre se acogió a su derecho a no prestar declaración, el juez acordó la absolución para ambos.
Las mismas fuentes señalaron que los juzgados de Córdoba, además de la anterior, registraron entre 2007 y 2013 hasta cinco denuncias presentadas por la detenida en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer contra tres hombres diferentes. Tres de estos procesos terminaron con un fallo de condena para el hombre que fue denunciado en cada caso.
Carmen B.R. pasó a disposición judicial el pasado sábado tras ser detenida el viernes. Ese día, agentes de la Policía Nacional que investigaban sobre el paradero del hombre, después de que su madre denunciara su desaparición en octubre, hallaron el cadáver en la vivienda que ocupaba la pareja. Una vez ante el juez, la mujer se acogió a su derecho a no declarar y el titular del juzgado de Instrucción número 2, en funciones de guardia, acordó para ella prisión provisional sin fianza por un presunto delito de asesinato.
La autopsia desveló que el cadáver presentaba heridas por arma blanca y estaba momificado. El hombre pudo perder la vida en octubre y el cuerpo habría permanecido oculto entre escombros todo ese tiempo en la vivienda en ruinas que ocupaban ambos en la plaza de la Fuenseca. En la misma se halló un arma blanca que podría haber sido utilizada para la agresión mortal. Los vecinos habían avisado en varias ocasiones del olor insoportable proveniente de la casa.
El subdelegado del Gobierno en Córdoba, Juan José Primo Jurado, afirmó ayer que tanto el hombre como la mujer son cordobeses y que «los dos tenían antecedentes policiales y tenían vinculación con temas de drogas». Sobre las causas de esta muerte comentó que, «en principio, parece que es un caso de violencia doméstica, que la mujer habría apuñalado al varón», aunque matizó que «esto es a expensas de que continúe la investigación».
El subdelegado apuntó que «la Policía descubrió el cadáver por el mal olor», ya que «estaba escondido bajo unos escombros». Primo Jurado añadió que «con el informe de la autopsia se demostró que la muerte había sido por heridas de arma blanca».
