Habría que remontarse a los primeros siete meses del año 2008, cuando aún no se veían señales de la crisis en la que entraría España, para encontrar unas cifras de venta de viviendas más altas que en los primeros siete meses del 2018. El Instituto Nacional de Estadística (INE) publicó ayer la estadística de transmisiones de derechos de la propiedad, en la que se observa que entre enero y julio se adquirieron en la provincia 3.884 viviendas, lo que supone un 16,07% más que en el mismo periodo del 2017. Además, este crecimiento supera el que se ha producido en España (+11,69%) y en Andalucía (+14,94%).

Solo en julio se compraron en Córdoba 571 inmuebles, lo que supone un 17% más que en el mismo mes del 2017. No obstante, en lo que va de ejercicio, junio, con 628, y mayo, con 625, son los que contabilizan más, siendo el mes de marzo el que tuvo menos (459).

Como viene siendo habitual desde hace años, el mercado de la vivienda de segunda mano es el que está absorbiendo el mayor volumen de operaciones en la provincia. El 84% de los inmuebles que se compraron hasta julio fueron usados (3.269), mientras que solo 615 era viviendas nuevas.

Del mismo modo, la vivienda libre es la que también muestra el mayor dinamismo frente a la protegida. Así, en este periodo se transmitieron 3.323 viviendas libres, mientras que solo fueron 561 protegidas. Todo a pesar del fuerte crecimiento de las VPO que se está observando durante el 2018, que se ha elevado un 39,55% respecto a los primeros siete meses del 2017.

Por lo que se refiere a España, hasta julio se compraron 308.131, de las que 253.988 eran usadas. En Andalucía la cifra asciende a 59.887, siendo también las de segunda mano y las viviendas libres las que están mostrando el mayor dinamismo en lo que va de año.