La obra de la ronda Norte, que lleva adjudicada meses y no empieza, se iniciará este verano. Eso es, al menos, lo anunciado ayer por el nuevo presidente de Urbanismo, Salvador Fuentes (PP), que prevé que el tramo municipal, los 2,4 kilómetros que unirán Fuente de la Salud con la Nacional 432, se reanude en «julio» o «agosto». Para ello solo falta la formalización del contrato, ya que la ejecución de la vía está encargada y la dirección de obra también. En realidad, el tramo que tiene que reanudar Urbanismo es de iniciativa privada, ya que iba ligado a las obras de Mirabueno que ejecutaba hace más de una década la junta de compensación encabezada por Marín Hilinger. En el 2008, cuando la obra estaba ejecutada al 69%, quedó parada y desde entonces el organismo municipal ha estado intentando reiniciarla con el dinero de un aval de 12 millones.

La ronda Norte estará coja sin el tramo que corresponde a la Junta, casi 4 kilómetros que partirán de la ronda de Poniente para concluir en Fuente de la Salud, donde se unirán al municipal. Fuentes anunció ayer que la semana que viene habrá una reunión con la Junta para «replantear el tramo autonómico», que la Consejería de Fomento va a revisar, y «compaginarlo con el municipal». El concejal dejó claro que el Ayuntamiento «no va a consentir» que haya «una barrera en la ciudad» cuando culmine la obra del primer tramo por no existir el segundo. A su juicio, «el tramo municipal no tiene sentido sin el autonómico». Por ello, considera que la ronda debe ser «pactada» y que debe impulsarse la parte que promoverá la Junta. De esa iniciativa, lo que hay es un anteproyecto presentado en el 2010 por la entonces consejera de Obras Públicas, Rosa Aguilar, y presupuestado en 220 millones, que con la crisis quedó aparcado. El hecho de negociar con la Junta no significa que Urbanismo pretenda paralizar los 2,4 kilómetros cuya obra está adjudicada a Vialex por 6,7 millones y un plazo de catorce meses. Fuentes garantizó que el proyecto municipal seguirá adelante.

Las obras salieron a concurso en enero del 2018 y a finales de año había propuesta de adjudicación y fecha prevista de inicio, pero los trabajos se han retrasado al faltar la dirección de obra, encargada a Getinsa-Euroestudios/Gis por 165.670 euros, que dirigirá también la de la urbanización de la antigua Azucarera de Villarrubia, parada hace casi una década y que Urbanismo reanudará con otra aval. De esta obra, encargada a Viguecons Estévez por 3 millones y un año de plazo, falta formalizar el contrato.