Una vez que el confinamiento por el coronavirus ha dado paso a la desescalada, los representantes vecinales consideran que hay que retomar los proyectos que han quedado aparcados desde que empezó el estado de alarma. El presidente del Consejo del Movimiento Ciudadano, Juan Andrés de Gracia, se ha reunido con el de Urbanismo, Salvador Fuentes, para demandarle la reactivación de asuntos que llevan tiempo reclamando y que no terminan de ver la luz, entre ellos, la puesta en marcha de una oficina de parcelaciones que agilice los procesos de las urbanizaciones que están en vías de regularización y que este órgano, así como Al-Zahara y el resto de distritos y colectivos de parcelistas que forman parte de la comisión de periferia, quiere que se formalice en julio. Urbanismo se ha comprometido con los vecinos en ir abordando sus demandas, como ha confirmado el propio Fuentes.

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Aunque están a la espera de la nueva ley de suelo de la Junta, que, según De Gracia, afectará a las entidades de conservación y a las zonas de especial protección, los representantes vecinales consideran que la oficina “debe trabajar ya con todos los procesos de regularización que hay en marcha, como los de Alamillo y Torreblanca, hablar con los afectados y ver cómo agilizar al máximo”. A su juicio, “los servicios básicos son imprescindibles” y más en situaciones como esta en las que hay una pandemia.

Dentro de las parcelaciones, De Gracia ha pedido explicaciones por la cerca de la decena incluidas en la innovación de Poniente, que llevan años esperando acabar el procedimiento para ser consideradas urbanizables. “El expediente está en Gerencia y se tenía que hacer un informe ambiental pero nunca supimos nada”, señala.

Vecinos y Urbanismo han quedado en reunirse en dos semanas para impulsar la ordenanza de la inspección de edificios, de la que se revisarán las alegaciones presentadas para incluir las que sean posibles. De Gracia insiste en poder continuar con la tramitación de la ordenanza y aprobarla de manera definitiva cuanto antes, evitando así otra ampliación de plazos más.

El compromiso ha sido también, según De Gracia, que en junio deben desbloquearse las zonas privadas de uso público. “Urbanismo debe definir qué zonas se pueden acoger antes a los convenios y fijar el acuerdo tipo”, afirma, para que dejen de ser espacios en los que los servicios están solo a cargo de los vecinos.

Necesario es también para los vecinos encontrar cuanto antes una solución para el centro de salud de El Higuerón, que tendrá que ser desalojado cuando empiecen las obras del centro cívico, proyecto para el que Urbanismo ha autorizado la modificación de crédito tras recibir los 1,4 millones de la empresa que realizó los estudios geotécnicos. Cuanto antes debe llegar una solución también, según De Gracia, para el centro de salud de Villarrubia, que “está desbordado”. A su juicio, Urbanismo debe ceder un terreno a la Junta (hay varias opciones) para que construya uno nuevo.

El CMC ha pedido a Urbanismo que desbloquee con la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir la situación de las zonas inundables del casco urbano, ya que aún hay licencias atascadas a pesar de los avances anunciados.

Vecinos y organismo municipal quedaron en reunirse antes de aprobar las ordenanzas del 2021 para analizar las propuestas que hizo el CMC en relación a zonas privadas de uso público y al IBI de las parcelaciones. De Gracia insiste en las sentencias que siguen llegando y que indican que las viviendas ilegales sin plan parcial aprobado deben pagar IBI rústico y no urbano.

Afloran bares con veladores sin licencia

La situación de los veladores durante la desescalada también fue abordada. Según De Gracia, las peticiones de ampliación de la zona de veladores están poniendo de manifiesto que había negocios sin permiso para instalar mesas y sillas, que ahora tienen que pedirlo si quieren tener más espacio en sus terrazas. “Sin licencia, el que está al lado, puede utilizar la zona que le pertenece”, señala. Este caso se está dando en zonas ordenadas, es decir, las más conflictivas, en las que los hosteleros se tienen que poner de acuerdo para solicitar la ampliación de espacio, según ha confirmado Fuentes. Entre ellas están la avenida de Barcelona y La Corredera. En cambio, las peticiones individuales que los hosteleros están dirigiendo a Urbanismo son de negocios con licencia. Fuentes ha firmado este jueves media docena de autorizaciones, de las 66 presentadas hasta ayer.

A pesar de que los plazos para pedir licencia para las terrazas de este año acabaron en febrero, a Urbanismo siguen llegando. En la web de Urbanismo aparecen unas 300 frente a las más de 500 del año pasado.

Los vecinos estarán especialmente atentos al tratamiento que se dé a las plazas como la Flor del Olivo o La Corredera, ya que “no consiste en llenar toda la plaza, sino de mantener un espacio suficiente”. De Gracia ha insistido en la provisionalidad de las ampliaciones, aunque da por hecho que seguirán todo el verano, por lo que avisa de que estarán atentos y evaluando constantemente la aplicación.