La Universidad de Córdoba se ha quedado sin representación estudiantil tras la dimisión del presidente, José Emilio Carbonell, y la vicepresidenta del Consejo de Estudiantes, Cynthia Bustos, en respuesta a la moción de censura, finalmente sin efecto, presentada por el secretario y el tesorero del CEU, según explicó ayer el propio Carbonell. El presidente del órgano de representación aseguró haber recibido amenazas e insultos en las semanas previas a su dimisión, por lo que decidió abandonar el cargo tras cesar a las dos personas de su equipo promotoras de la moción de censura. Carbonell, que no tiene intención de volver a presentarse al cargo, ya que este año acaba sus estudios, señaló que hasta octubre, fecha en la que se podrá volver a convocar elecciones estudiantiles, el vicerrector de Estudiantes, Alfonso Zamorano, y la comisión de Asuntos Estudiantiles estarán al frente.