El proceso de adjudicación de las ocho cafeterías de la UCO para este curso, tras la rescisión del contrato con la anterior adjudicataria, está siendo más complicado de lo previsto y, pese a que el vicerrector de Infraestructuras, Antonio Cubero, aseguró ayer que «lo estamos haciendo a la máxima velocidad que la ley nos permite», lo cierto es que aún quedan pendientes por abrir cinco de ellas, cuando hace más de un mes que comenzó el curso.

Ayer mismo abrió sus puertas a pleno rendimiento la mayor cafetería del campus de Rabanales, la del aulario interior, adjudicada a Cocinados Mirabueno, la misma empresa que tiene adjudicada la del Rectorado, que abrió el 1 de octubre. La primera en estar en funcionamiento fue la de Ciencias de la Educación, a mediados de septiembre. Cubero informó de que las del Paraninfo y residencia Lucano, en Rabanales, están en fase de concurso de nuevo, esta vez las dos juntas, pues quedó desierta la licitación. Sobre las de Filosofía y la del aulario exterior de Rabanales, «hay una empresa, Hyris, muy interesada en quedarse con ambas, y podremos tener respuesta en unos días», mientras que la de la Escuela Politécnica de Belmez «está a punto de adjudicarse». Mientras tanto, dijo Cubero, se han reforzado las máquinas de vending en los centros y los microondas. El vicerrector aseguró que «estamos tomando las medidas necesarias para que esto no vuelva a ocurrir».